Traductor

Buscar en este blog

viernes, 20 de noviembre de 2020

El humillante abandono de los canarios

El Gobierno socialcomunista ha vuelto a dar muestras, más que evidentes, de que si antes había anunciado el principio del fin de la dispersión de los presos de ETA por cárceles del país, con un nuevo acercamiento de otros seis presos a prisiones cercanas a las provincias vascas, el fin del proceso de acercamiento de la totalidad está cada vez más cerca. Uno de los otros seis trasladados lo ha sido a la prisión de San Sebastián y, además, se le ha concedido el Tercer Grado, es decir, la semilibertad. Emilio Salaberría, que así se llama el afortunado bandido, fue condenado a veinte años de prisión, por colaborar con banda armada, por ser terrorista.

Por si los vínculos de amistad entre los socialcomunistas y los terroristas no estuvieran claros, hoy se ha sabido que durante el confinamiento dirigentes bilduetarras visitaron a los presos dispersos por varias prisiones del país en once ocasiones -que seguro que fueron más, porque antes Instituciones Penitenciarias solo reconocía dos o tres visitas-, cuando las víctimas no pudieron trasladarse a ningún cementerio donde están enterrados los asesinados por la banda criminal. O sea, por si era poca la humillación de las víctimas, ahí le va el doble o el triple, con las afirmaciones de una diputada de laPesoé, que ha calificado a los bilduetarras en el Congreso de "buenas personas". Lo que nos viene a recordar a su indecente camarada Zapatero, que considera a elGordo Otejjji un "hombre bueno, un hombre de paz". Velahí queda. Dicho está.

Todos estos continuos traslados de presos etarras los hacen Sánchez y Marlaska aprovechando el follón que tienen montado en Canarias con los migrantes, que cada día son más, procedentes del Sahel, pero principalmente del reino de Marruecos, que les da manga ancha. Por culpa, principalmente, del ViceDos de Sánchez, el payaso comunista, que se mete en camisas de once varas -así le quedan las suyas-, donde nadie lo llama, pidiendo un referéndum para el Sahara, que, en el fondo, es como si lo pidiera en España para Cataluña y otro para intentar derrocar a la Monarquía imponiendo una Republiqueta de mierda.

Eso de lo de Canarias y los migrantes es otra que se ha buscado el Gobierno socialcomunista, por incapaz. Es tan soberbio Sánchez, y tan ignorante a la vez, que ha hecho de menos, por mucho tiempo, demasiado, al rey de Marruecos, un vecino incómodo, correoso, pero con el que conviene mantener buenas relaciones, principalmente para evitar esas avalanchas de cientos y ciento de migrantes, que llevan las mafias en barcos nodriza para hacerlos pasar a pateras, cuando están cercanos a las costas españolas.

Bien es cierto, que muchos de los que "huyen" de sus países de origen lo hacen buscando una vida mejor, más digna. Han tenido que hacer, muchos de ellos, periplos impensables hasta llegar a España. Han dejado a sus familias, que no saben si volverán a ver algún día. Han pasado unas condiciones inhumanas y unos hacinamientos vergonzosos como los vemos en Canarias. Pero, también es cierto que nuestros compatriotas de las islas también lo están pasando mal, realmente mal, porque se sienten invadidos y, a la vez, abandonados por el Gobierno, y expuestos a contraer enfermedadades -no solo el coronavirus-, sino de todo tipo, cuando no a tener que soportar posibles graves incidentes de orden público.

El Gobierno socialcomunista, en esto como en la pandemia, vuelve a mostrar claramente su incapacidad para resolver problemas. Es un Gobierno en el que la mayor parte de sus miembros son unos verdaderos iletrados, empezando por su presidente. Sánchez no sabe resolver, ni sabe implicar en el problema a los estados miembros de la Unión Europea, ni al Rey de Marruecos. Una verdadera indecencia, de un manifiesto indecente.