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Así que, que lo sepan, uno de los candidatos de laPesoé por Burgos a las Cortes de Castilla y León, el que ni merece escribir su nombre, bueno sí, se llama Luis Briones, califica de franquistas a los de Vox y se muestra totalmente partidario de perdonar a los asesinos de la banda terrorista ETA. O sea, que los pongan en la calle ya. Claro que de lo que se come se cría. Este repugnante individuo no hace más que copiar de su secretario general, elBandido Prepotente. Después de todo lo que nos estamos enterando de las negociaciones y concesiones a los presos asesinos etarras, de todo lo que mercadean con ellos los del ministerio del Interior, los de Marlaska, con el consentimiento de elBandido presidente del Gobierno de España, no hay que extrañarse de nada. Y no se asusten si, en detrimento, humillación y odio hacia las víctimas nos encontramos de la noche a la mañana con una amnistía para todos estos asesinos de más de ochocientos compatriotas y otra, para, complementar, a los delincuentes catalanes del Golpe de Estado, que fueron muchos más de los que estuvieron en prisión, posteriormente indultados por elBandido, y los inútiles huidos de la Justicia. Así se las gastan los socialcomunistas, así se las gasta Sánchez para conformar un apoyo franquestein a su gobierno.
Hay que estar atentos, pero que muy atentos, sobre todo desde la Audiencia Nacional, para que el gobierno del separatista Urcuyu no los vaya poniendo en la calle, como ha avisado sin sonrojos el peneuvista. No quiere presos en las cárceles, que le salen muy caros, y se ha inventado un protocolo para ir sacándolos, con unos programas de reinserción que producen risa, cuando no vómitos y asco. En particular con los presos de la banda asesina ETA. A estos ya les tiene preparada la hoja de ruta: una vez que llegan a las prisiones vascas les sube el grado de prisión: de primero a segundo y de segundo a tercero, con un período de distanciamiento temporal de uno a otro de seis meses. ¡Vayan haciendo cálculos! Con el tercer grado ya adquieren la libertad provisional, y, como el presidente vasco no quiere que pasen penurias, les buscará alojamiento en pisos. Lo que no sabemos, todavía, es si les concederá un salario, lo que no es descartable y superior al mínimo profesional recientemente aprobado por el gobierno social comunista.
Menos mal que la Audiencia Nacional, ya ha pillado dos casos y ha obligado a los dos etarras, que ya estaban libres, a volver a prisión. Seguro que está desolado el candidato sinvergüenza socialista burgalés a las Cortes de Castilla y León, después de esta pillada. Desde luego para él ha sido doble: no ha conseguido su objetivo como es el de poner en libertad a todos los asesinos y ha quedado al descubierto como un energúmeno, que con su actitud ha despreciado de manera vil y canalla a las víctimas de los etarras. También ha quedado al descubierto su líder regional y candidato a la presidencia de la Junta, el socialista Tudanca, cuando los periódicos han informado de que es propietario de seis pisos en la región. ¡Vamos que con tanto como predican los socialcomunistas, ya podía compartir alguno!