A buenas horas
mangas verdes, que es así como se dice. Para al final, nada. Porque, pese a que
la Audiencia Nacional ha decidido
abrir juicio oral por las pitadas al Monarca
y al himno de España en la final de
la Copa del Rey celebrada en el Campo Nuevo del Barcelona en 2015, ya podemos saber la sentencia con más rapidez
que actúa la Justicia: no pasa nada,
que es mera libertad de expresión. La democracia tiene sus grandezas, pero
también sus miserias.