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lunes, 23 de mayo de 2022

Sánchez califica de ladrón al padre del rey

El Gobierno de España, por boca del analfabeto e inútil ministro de Consumo -el que nos quiere dejar sin comer carne y beber vino o cerveza en las comidas de los restaurantes y a compartir la lavadora con los vecinos- ha acusado al rey emérito, Juan Carlos I, de ser un ladrón. Semejante imbécil lanza acusaciones así por que así, sin pruebas. ¡Que lo pruebe, el muy mentecato! El emérito no tiene pendiente ninguna causa judicial. Si la tiene este indigno y vago ministro que lo denuncie y que lo lleve a los tribunales. Mientras tanto, y sin más demora, ya se hace tarde, el presidente del gobierno, elBandido Prepotente, debería haber cesado de manera inmediata a su indeseable ministro Garzón, porque, de lo contrario, hemos de entender que está de acuerdo con la grave acusación que el comunista ha lanzado contra el emérito, porque este muermo es miembro del Ejecutivo desde que se levanta hasta que se acuesta, y si él habla y nadie lo desmiente y, en este caso no lo cesa, es que Sánchez está de acuerdo con él. Es decir, Sánchez y su gobierno acusan al rey emérito de ladrón. Sánchez está obligado a desmentirlo o a cesarlo, o las dos cosas a la vez.

Pero, ni por asomo va a hacer eso elBandido Prepotente narciso. Le tiene miedo a los comunistas socios de coalición, mientras que su propio partido, laPesoé, del que es secretario general, está difundiendo a través de sus medios de comunicación -que lo son casi todos- la máxima de que Juan Carlos I está perdiendo la ocasión de dar una explicación y pedir perdón. ¡Explicación de qué!, como dijo a los periodistas el emérito cuando llegaba a La Zarzuela

Lo que es más que evidente que tanto laPsoé, como sus socios de coalición, los comunistas, y los socios de Investidura -léase los delincuentes golpistas catalanes, a los que indultó elPrepotente- lo que persiguen es socavar la institución monárquica. Todos los ataques contra el emérito lo son contra la figura del rey Felipe VI.  Ahora que Felipe VI puede gozar -con el apoyo de la ciudadanía- de un inmenso paraguas en el que resbalan todos los improperios de comunistas, golpistas, independentistas y etarras.

Lo triste de este país es que energúmenos como el portavoz de los golpìstas en el Congreso de los Diputados se vayan de rositas pese a haber difundido secretos de Estado tratados en la Comisión de Fondos Reservados o Comisión de Secretos. Al papanatas ese, empleado de tienda textil, le faltó tiempo para contar lo que se había tratado en la comisión, de lo que informó la ya exdirectora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, cesada por Sánchez para complacer a los golpistas. Es que resulta que los abogados del Congreso no ven delito en eso. ¡Mejor se ponían gafas estos letrados iletrados!

O que la alcaldesa de Salobreña, socialista ella, quite del censo a la candadita de Vox a la presidencia de la Junta de Andalucía. Así lo decidió ella solita, porque le vino en gana, porque están cagaos los de laPesoé. Ahora la Junta Electoral considera que Olona estaba censada, y bien censada, en tiempo y forma. Lógicamente Olona la ha denunciado por prevaricar, y bien prevaricar.