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Pues, miren, lo mismo que la playa estaba desierta y el mar bañaba sus pies, el agua le debió llegar a Tezanos, el socialista de las encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de laPesoé. Es que está muy acojonao el genio y figura hasta la sepultura y asesor de elPrepotente, un tal Iván Redondo, porque todos sus planes para acabar con la pepera Ayuso se le han ido al carajo. Ni un ataque ni otro han podido con la pepera, que, cada vez más, sale más fortalecida de cada embate. Bueno, la cosa está de esta manera que hasta la presidenta de Madrid está retando a elPrepotente Sánchez a verse las caras el 4M. Iván Redondo ya no sabe ni qué hacer. El asunto se le está yendo de las manos.
Entre lobos no se comen, y, si hace al caso, se ayudan. Algo como lo que le ha sucedido a los dos socialistas, al estratega Redondo y al manipulador Tezanos. Cuando nadie se lo esperaba, porque no estaba previsto, va y llega Tezanos y se saca una encuesta sociológica de debajo del sombrero. Falta le hacía a Sánchez esa encuesta, que no deja de ser una ayudica también para Redondo.
El caso es que Tezanos se cepilla de un plumazo a los de Ciudadanos, para que vea la ciudadana Arrimadas, como se las gasta Sánchez: "Roma no paga a traidores" o todo por un plato de lentejas. Una vez que Tezanos ha desplazado para un lado donde ni se vea ni se hable de los Ciudadanos, hace casi lo mismo con los de Vox de Abascal, aunque le deja un respiro porque eso le puede venir bien a Sánchez para asustar con la extrema derecha. Por la izquierda le da un montón de escaños a los del vago Errejón, que doble, o más en escaños, a los del payaso comunista. Es decir que la pepera Ayuso va a sacar los votos que tenga que sacar y tendrá un poco de ayuda, si acaso, de Abascal. En total 68. Otros tantos, 68, sacarían todos juntos los de laPesoé, los del vaguete y los del payaso comunista, al que, de momento, no echa Tezanos de la escena electoral y política.
Como las prisas no son buenas, y Tezanos lo ha hecho todo atropelladamente, casi fusila a los de laPesoé y a toda la izquierda extrema; es más, pone a laPepé a menos de dos puntos de laPesoé si es que se celebraran unas elecciones nacionales. Aunque dicen los expertos, otros expertos, que los números de Tezanos no cuadran, que la encuesta está mal realizada. ¡Ya me dirán, expertos o no, cuándo alguna de las encuestas de Tezanos está bien realizada!
Bueno, pues con esto, de momento, Tezanos pone, aunque no lo parezca, una barra en la rueda de Ayuso, para que se tropiece, porque o saca mayoría absoluta ella sola o es muy probable que no pueda contar con aliados, como Abascal o Arrimadas. Es también una manera de asustar al electorado de izquierdas, de meterles a sus votantes el miedo en el cuerpo para que acudan a votar en masa. Pero, quizá esto ya no cuela, porque las elecciones se van a librar en la decisión, curiosamente, de los indecisos: uno de cada cuatro madrileños no sabe todavía qué es lo que va a votar. De ahí las prisas, aunque con improvisaciones de Tezanos.
Aunque mucho daño le está haciendo a laPesoé del candidato Gabilondo el comportamiento del ministro de los Interiores, Marlaska, elChulo. El comportamiento y las decisiones judiciales que lo han dejado para el arrastre. La destitución del coronel de la Guardia Civil Pérez de los Cobos y el varapalo que le da a Marlaska el tribunal que juzgó el recurso del guardia civil es difícil de asumir por el Gobierno, y el personal no entiende la postura del ministro, que ya anunció que no tenía voluntad de dimitir, lo mismo que Sánchez no tiene voluntad de cesarlo, más bien, al contrario, ya le ha mostrado su apoyo.
Pero los acercamientos por parte de Marlaska de los asesinos etarras -cerca ya de trescientos-, la cinta de correr que se compró a cargo del erario público y la mesita en la sala de estar y los todo terrenos de tecnología punta regalados a la policía de Marruecos, mientras los de la Guardia Civil se caen a cachos están causando un desgaste bestial a laPesoé y en particular al candidato de Madrid, Gabilondo, casi tanto como la mala gestión de la pandemia y el caos de las vacunas contra el virus y el caos social y económico.