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Lo más normal es que el rector de la Universidad de Lérida hubiera presentado ya, sin perder un minuto, una denuncia contra el rapero, o lo que sea ese elemento, Hasél. Sencillamente, porque este individuo, acompañado de otros de su misma calaña, tomaron al asalto el edificio del rectorado de esa Universidad y él y otros destrozaron mobiliario del recinto, mobiliario que pagamos todos con nuestros impuestos. Que se sepa, no ha habido denuncia por parte del rector, lo que hace suponer que todos los desperfectos los va a pagar de su bolsillo. Pero, aunque así fuera, el rector está obligado a denunciar al rapero o ratero porque asaltó un edificio público, un bien público por el que debe velar el señor rector. Si no, que se vaya. Es tan responsable como el rapero.
Bueno, suponiendo que el rector no mueva la mano, que de momento no se sabe que lo haya hecho, para eso está el fiscal, el encargado de velar por la ciudadanía: pero, me da a mí que tampoco. El cantonto ese que no se sabe si es rapero o hace rápel, condenado por varios delitos como el de enaltecimiento del terrorismo, ofensas a la Corona y a las Fuerzas del Orden Público ingresó, por fin, en prisión, después de tres días de reírse de la Justicia, que se lo permitió. Menudo historial delictivo tiene el paisano, "comopasáunavaca", pero, así y todo, se va a librar de otros dos: el asalto al rectorado de Lérida y la destrucción con premeditación y alevosía de bienes inmuebles de la sociedad.
Son, en realidad, pocos los seguidores del rapero, pero que gritan mucho y meten mucho ruido y se siente apoyado, como se sentían los cuperos catalanes por el neandertal presiente de la Generalidad, por el payaso comunista tontoelpueblo y pijo de la casta de Galapagar. Ya saben, elViceDos quiere reformar todo lo que haya que reformar con tal de sacar al delincuente rapero de la cárcel. Lo mismo pretende para con los golpistas delincuentes-chorizos catalanes y los terroristas etarras. De casta le viene al galgo.
Por cierto, el galgo se metió en camisas de once varas, al acusar a laPepé de pagar a la cadena es,radio para que mienta sobre los atentados del 11-M. El payaso comunista salió "trasquilao". Federico Jiménez Losantos lo puso a escurrir (https://www.youtube.com/watch?v=h5ph9oXekDE). Vamos de vuelta y media: lo llamó desde piojo analfabeto, a descerebrao, putijin, esbirro de Irán y de Venezuela, pichafloja, macho alfa de pacotilla, hijo de su padre y nieto de su abuelo y se preguntó de dónde sacó el dinero para comprar el casoplón, y todo ello demostrado, que para eso lo mantiene escrito Losantos en su último libro.
Pues nada, seguro que no tiene bemoles el payaso comunista para llevar a Losantos a los tribunales. Tan amigo que es de acudir a ellos. Pero, claro, ahora tiene la mente puesta en otro sitio, en las violentas manifestaciones de Madrid y Barcelona, donde los manifestantes a favor del rapero arrollan todo lo que encuentran a su paso. Para el payaso comunista lo más interesante ahora es ver cómo los de Hasél agreden a los policías y los patean. Eso le encanta al payaso comunista, ver apaleados a los agentes del orden, como le gustaría azotar hasta que sangrara a la presentadora Mariló. O sea, además de los calificativos que le ha brindado Losantos, un delincuente en potencia y un sádico machista. Y eso que su compañera del casoplón es la ministra de Igualdad. Miren hasta dónde llegan estos comunistas que el portavoz del partido en el Congreso ha publicado un tuit apoyando a los manifestantes, que la están armando en Madrid y Barcelona. Entre delincuentes anda el juego.