Idílico el paseo
que se ha dado por Ávila el pepero Casado, que se nos ha ido hasta allí
para visitar una vaquería, el hogar de las vacas. Se conoce que va a probar si
eso de visitar y hablarle a los rumiantes le da suerte para las Generales, como parece –eso dicen- que
se la dieron a Juanma Moreno, quien
fue a echarles un mitin antes de las elecciones andaluzas y, ahora, ya lo ven,
de presi de la comunidad “intocable” de laPesoé, de Andalucía. Un momento de descanso para Casado antes del inicio de
la campaña electoral, que se le presenta larga y dura al líder pepero, que de
estar de “comunicador” de Rajoy ha
pasado casi en horas veinticuatro a candidato a la presidencia del Gobierno de España.