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Por supuesto, contrarios a todo tipo de violencia. Afortunadamente los cócteles molotov lanzados contra la sede de los de la extrema izquierda en Murcia solo causaron daños materiales. No obstante, el payaso comunista, exvicedos del gobierno socialcomunista, clama al cielo y culpa de ello a los cachorros de la extrema derecha. Coño, pues si sabe quién ha sido, que denuncie ante los tribunales. Que él mucho acusar, pero sin pruebas. Y a nosotros que nos encantaría saber quién o quienes fueron los autores. Es lo mismo que hace con respecto a la pepera Ayuso, a la que acusa de no se sabe qué y amena continuamente con meterla en la cárcel.
Menos lobos, hombre, que poco se pone igual de energúmeno cuando los que sufren los ataques son otros partidos. Se la suda. Así como los intentos de agresión a otros cabezas de lista o líderes de partidos. Ya digo, se la suda. Le da exactamente igual que los asesinos de la banda ETA hayan matado a casi mil compatriotas. Todavía no le hemos oído ni una reprimenda por ello; eso sí, ha pasado olímpicamente de las víctimas. Es más, los etarras tenían su teléfono en Madrid por si acaso. Y es amigo y camarada del pistolero elGordo, el hombre bueno y de paz que decía el impresentable Zapatero. Como es amigo de los golpistas catalanes, de los chorizos que intentaron un Golpe de Estado.
Ahora nosviene el payaso comunista presumiendo de hombre del pueblo. Tiene tal cara dura eltontoelpueblo, este pijo y ridículo de la casta, que se desplaza desde Galapagar -zona exclusiva, ya digo, de la casta, junto a la sierra de Madrid- a Vallecas. Ya estuvo en Coslada, y es de imaginar que en breves hará campaña por RivasVaciaMadrid, los barrios por donde se movía y vivía antes de irse al casoplón. No ha tenido cara dura ni nada, el payaso comunista. Se dedicó a visitar los lugares donde se forman las colas del hambre. Jamás durante la pandemia se preocupó de sus exvecinos los de Vallecas y RivasVaciaMadrid. Ni se preocupó de si pasaban hambre o tenían alguna necesidad. Pero, no se extrañen, también hizo caso omiso de las residencias de nuestros mayores, donde murieron tantos ancianos por el coronavirus. Dependían de él, pero como quien oye llover.
No si con cara los hay en el gobierno al que perteneció. Además de la ya reconsiderada como tal la de elPrepotente, le sigue en el uso y abuso el ministro de los Interiores, del que dicen sus compañeros de Gabinete que es un soberbio como no hay dos, pero no en el sentido de alguien estupendo o superior. Todo lo contrario, en el sentido de engreído y chulo. Eso se ve. Pero, elPrepotente lo ha arropado y lo mantiene en la poltrona, como es lo lógico, porque él fue quien fulminó al coronel Pérez de los Cobos y el ministro mamporrero Marlaska quien ejecutó la orden. También está el ministro del caso Delcy, pero eso es otra historia.
Pues nada. Viernes Santo, en el que no han salido procesiones por segundo año consecutivo a causa del coronavirus. Esperemos y confiemos en que cuando pase la Semana Santa el índice de contagiados no haya aumentado y que nos lleguen vacunas, miles, millones, y que sigan vacunando a marchas forzadas, para inmunizarnos cuantos antes mejor. Ahora parece que la Unión Europea va a prescindir de la de AstraZeneca, una vez se hayan vacunados por segunda vez a los inoculados con esa marca. Ya es hora de que vaya la Comisión reconociendo sus errores comerciales.