Traductor

Buscar en este blog

martes, 5 de enero de 2021

Sábados, domingos y fiestas de guardar

Pues si esto es lo que nos traen los Reyes Magos, mejor se habían quedado en Oriente. No desciende el número de fallecidos por el coronavirus y aumenta más que de manera considerable el de los contagiados por el coronavirus, aumenta igualmente, ya ni se sabe cuánto, el número de parados, que mejor no contarlos y, en breves, nos llega de manera inevitable la nieve a prácticamente todo el país. Un colapso. A ver si es verdad lo de año de nieves año de bienes; aunque este año el refrán se nos va a resistir en su veracidad. Pero, vamos, que lo del paro se podrá arreglar, pero no con estos negados socialcomunistas, que ya nos han metido en la quiebra social y económica. Lo de la salud, no tan rápido como debería.

Son unos incapaces. Cada día que pasa, más. Increíble que esta gentuza iletrada, inculta y, por consiguiente mal educada, haya podido llegar a donde ha llegado. Bueno, si quieren, la explicación podemos encontrarla en los suyos, cegatos y cerriles, y en sus aliados de Investidura los comunistas del payaso cabezón, los golpistas catalanes y los Bilduetarras. ¡Todo un FranKestein! Claro, así nos va con toda esta tropa

Pero en todo. En la economía de serete, cuesta abajo y sin frenos. Y en lo sanitario, ahora que ya disponemos de los posibles, dejando pasar el tiempo y, si a mal no viene, estropeando vacunas. Porque sigue siendo vergonzoso que solo se haya vacunado a poco más de noventa mil personas, de un total de cuarenta y seis millones. A este paso, nos vuelven a dar las uvas y seguimos en el mismo peligro que ahora. En Israel, ya llevan dos millones de personas vacunadas de un total de nueve millones.

Coñe, que pongan las vacunas los que tengan que ponerlas. Pero, que la pongan, incluidos los festivos y domingos! Esto se veía venir. La improvisación del Gobierno socialcomunista era previsible, tanto como los compases de una composición que se repiten. Continúa escudándose Sánchez elPrepotente en las comunidades autónomas. Volverá como salvador de las mismas, de más de cuatrocientas mil vidas de compatriotas, cuando ya vamos camino de los cien mil compatriotas muertos y de dos millones de contagiados por su incapacidad para gestionar la pandemia.

Si se sabía que no iba a haber personal sanitario suficiente para poner vacunas, muy sencillo, haberlo contratado con tiempo, que lo ha habido de sobra. Pese a ello, ahí está el Ejército, que como ha dicho la ministra, está a disposición de todas las comunidades y que cuenta con infraestructura. ¡Echen mano de él, leche! Como pueden hacerlo de los hospitales privados, que también se han ofrecido a colaborar en el empeño de manera gratuita. ¡O es que la medicina privada no vale! Ante una emergencia como la que estamos atravesando, todo es bueno si reúne los requisitos de seguridad necesarios.

¡Pero, por favor, muévanse! Aunque haya domingos, festivos o fines de semana. Esto es una lucha contra el tiempo del coronavirus. Y que se dejen de politiquillas de barrio bajeros, que para nacionalizaciones de los sueldos y las empresas, como pretende el payaso comunista, ya habrá tiempo. Para entonces ya veremos si el Gobierno socialcomunista se atreve a implantar en España el régimen venezolano o el ruso o el iraní. ¡A ver si los demás los dejamos!