Si
lo de ayer de los jueces con la absolución del líder de Def Con Dos nos planteaba el dilema entre reír o llorar, lo último
de laSeñáManuela es “padescojonarse”.
Entiéndaseme bien, o lo que es lo mismo, cómo mear y no echar ni una gota, con
perdón. La alcaldesa podemita quiere cambiar parte del mobiliario urbano, al
más estilo progre de lo que por entiende ella, la misma, la genuina A la pobre
mujer -que no es una señora pobre- le sucede otro tanto, como a algunos jueces
de la Audiencia Nacional, que la
calor les está sorbiendo el seso: primero, se lo licúa y, luego se lo evapora.
Se les queda, prácticamente, en nada.