El contenido prohibido de las maletas de Delcy

Si no fuera porque esto es muy serio, estaríamos desternillándonos de la risa. Pero, lo que está sucediendo con el "caso Ábalos" es de suma gravedad, tanta que, en cualquier otro país de nuestro entorno, ya le habría costado el cargo no solo al ministro, sino al propio presidente del Gobierno, que tanto quiere y defiende a su ministro de los Transportes. ¡Un "mandao"! Ni se sabe ya cuántas versiones circulan -o han hecho correr los socialistas- sobre los encuentros que mantuvo el secretario de Organización de laPesoé con la venezolana el veinte de enero. Al menos dos, uno en el avión de la "dulce Dency" y otro en la sala vip de la T-1, pero no de veinte minutos, como se dijo al principio, ni de una hora, sino de una hora y media en el espacio vip. Decía el ministro que no les dio tiempo a hablar de nada. ¡Hombre, si se refiere a arreglar el mundo, pues no!