Ya no cantan tanto
los golpistas como lo hacían la noche del TarracoArena.
Parece como que la Guardia Civil
está cada vez más cerca de las llaves “matarilerilerón”. Seguro que habrá más
carteles por otras imprentas, más dípticos, más propaganda ilegal, pero lo que viene
a resultar incuestionable es que ya son millones
los carteles de los que se ha incautado la Benemérita
y que, curiosamente, en la misma empresa que se imprimieron los de elPuigidemón –el hijo del pastelero- y
de los republicanos de elJunquera, se
hallaron los de los guarrillos de las CUP.