Alguien
ha tenido que pinchar muy fuerte por detrás a laSeñáManuela para que esta salga por delante, dando la cara, para
enfrentarse a los podemitas, que, aunque ella lo ponga en duda, son los que la
auparon al sillón, con alguito de ayuda de laPesoé.
La soberbia -acaso desesperación- que ha mostrado en su entrevista en El País podría considerarse como el anuncio
de algo que está por llegar, quizá hasta antes de las vacaciones. Para la
alcaldesa de Madrid -que ella misma
se dice no ser podemita-, el resultado del 26J
es el lógico para una izquierda que se ha mostrado poco flexible para negociar.