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¡Míralos, Sánchez! Míralos. Están ahí, escojonándose. Se han reunido en Francia, cerca de España, en un lugar de los vecinos, que también consideran que forma parte de los países catalanes. Pero, ni lo intentan independizarlo. Se les caerían los palos el sombrajo. En el fondo, son unos cobardes y no tienen güevos para ello. Aquí, sí. Aquí, todo los que les dé la gana. Dan un Golpe de Estado, y los indultan. Roban el dinero de todos los españoles y no lo devuelven, lo hace por ellos la Generalidad catalana, lo que, al fin y a la postre, es volver a robarnos. ¡Dos por uno! Más todo lo demás de lo que no nos enteramos. Ganas tenemos, por cierto, de saber el montante de lo robado por la familia criminal de Pujjjol, el que decía que España nos roba.
Con el permiso de Francia -el vecino que dio tanta acogida a los asesinos de la banda terrorista ETA- los golpistas se han dado un homenaje; además, escogieron la población gala de Elna para la celebración, no en vano esta ciudad fue la que dio cobijo y escondrijo a las urnas del referéndum ilegal del UnoaCero, que no pudo localizar la policía española -o sí-, pero que a buen seguro la policía francesa sí sabía de su existencia. Lo que sucedió es que le daba pereza informar a la policía española. O acaso sí la informó.
El caso es que los independentistas y los golpistas se fueron para Francia: unos, desde España; otros desde Bélgica y otros desde Suiza. Querían demostrarle a elPrepotente que se pasan por el forro los indultos. Vamos, que lo que quieren es la amnistía -para que puedan regresar los prófugos de la Justicia, sin que tengan que ser juzgados- y un referéndum para la autodeterminación. El que sea o no pactado, se la suda. Saben muy bien lo que quieren; es decir, todo eso y pasta, mucha pasta, que hay mucho vago que mantener en Cataluña, mucho vago y mucho paniaguado o apesebraos. Sí, elPrepotente los habrá escuchado, en la voz de uno de los golpistas, el delincuente Jorge, de Omnium Cultural: "lo volveremos a hacer, lo haremos juntos y lo haremos mejor". Ahí queda eso, que es muy fácil de entender.
Esa es la paz y la convivencia que predicaba Sánchez para justificar los indultos a esta manada de delincuentes. Pero, es que los socialistas son muy valientes. ¡Puff! No vean ustedes cuánto. Ahí está también, mírenlo, el magistrado Cándido Conde-Pumpido, el que fue fiscal general con el despreciable Zapatero. Es que forma parte del Tribunal Constitucional y fue uno de los que votó en contra de considerar insconstitucional el encierro al que nos sometió elPrepotente.
No vean cómo se ha puesto elCándido. ¡Como un verdadero estúpido y sinvergüenza y mal educado! Nunca demostró, la verdad sea dicha, buenas formas; siempre se mostró como un energúmeno engreído. Pero, ahora, como no se ha podido salir con la suya, ha puesto a parir a los sus compañeros de tribunal de "juristas legos", de pobres argumentaciones. Joer, la bilis se le ve a kilómetros. De todas formas, los socialistas se muestran en la contrariedad tal y como son: vomitivos y malos perdedores. Así, así se ha mostrado elCándido.
Anda, que ya le vale, al magistrado. De niño de colegio sobre la sentencia del Constitucional: "No resuelve, sino que crea un grave problema político, al desarmar al Estado contra las pandemias". De niño de colegio, ya digo. Y eso que tiene estudios el magistrado y que ha sido fiscal general del Estado y que ha llegado hasta el Constitucional. ¡Increíble! Sobran calificativos. Bien le han dicho que podría haber decretado elPrepotente el confinamiento, pero no como lo hizo, sino contando con el Parlamento, declarando el estado de Excepción o de Sitio. No sé si lo entiende elCándido o hay que volver a explicárselo. De cajón, vamos.