El exvicepresidente catalán Junqueras, sí, ese que donde pone la
bala pone el ojo, se ha ganado un premio
en la cárcel de Estremera. La
dirección le ha otorgado un “vis a vis” extraordinario. Podrá disfrutar de un “kiki”
más de los permitidos, por haber limpiado los cristales de la prisión. Vale.
Menos da una piedra, que en la mili los reclutas hacían lo mismo con papeles de
periódico y no le daban más rancho. Contento puede estar, y los de la prisión
también, de su buen y ejemplar comportamiento.