Marchando, bocadillo de calamares

El payaso comunista ya había decidido marcharse mucho antes. Pero, ojo, tengan cuidado, que un elemento como ese, que no tiene ni una pizca de educación, cuando se va no cierra la puerta. La deja entornada para escuchar a escondidas todo lo que se hable. Sabía de antemano, por mucha encuesta de Tezanos -tanto de las legales como las ilegales- que iba a perder, y por mucho, y que su mayor enemigo, el vago Errejón, le iba a escupir de nuevo a la cara. El payaso comunista tontoelpueblo, pijo y ridículo de la casta de Galapagar, podía haber dimitido tranquilamente desde el mismo día en que conformó las lista electoral a la presidencia de la comunidad madrileña.

Era lo lógico. Estaba cantado. Su batacazo no se veía venir era una realidad. Era algo que estaba anunciado. No sacaría más allá del numero de la posición del gafe Julio elRojo, el exJEMAD, (Jefe del Estado Mayor de la Defensa), por debajo del Rey en lo que a las Fuerzas Armadas se refiere. Así fue. Así aconteció. ElRojo no podría ocupar un escaño en la Asamblea de Madrid, a no ser por la dimisión del payasocomunista. Correría la lista y él entraría en el número diez. Estaba anunciada la debacle de los comunistas. Ahí está el dato. Pero, ahora que puede, elRojo renunciará también a la plaza. 

En donde se encuentre elRojo está el fracaso anunciado con antelación. Ya como militar fue un negao y no supo, no quiso o se lo impidieron, pero lo cierto es que la operación Atalanta fue un rotundo fracaso. No consiguió entrar en el ayuntamiento de Madrid, y la exalcaldesa podemita de entonces, laSeñáCarmena, lo despreció como jefe de gabinete del payaso comunista. Tampoco consiguió puesto alguno en las listas por Zaragoza, ni más tarde por Almería. Un dechado de fracaso. Un gafe. La ruina del payaso comunista.

En fin, quizá sea esta de Julio elRojo una de las mayores anécdotas de las consecuencias del 4M, pero que ha pasado inadvertida para muchos. Ya digo, con elRojo en la lista, el payaso comunista se sentenció a sí mismo. Ahora que, no se crean, que en la calle no se queda el de Galapagar. Más de cinco mil euritos al mes durante quince meses se lleva el comunista por haber sido miembro del Gobierno de Sánchez. Además, ya se ha buscado con Roures la puerta giratoria, aunque, quizás, no ha calculado muy bien y no está bien engrasada. O se lía a dar vueltas sin ton ni son o se queda parada en seco. 

Siempre le queda Venezuela al payaso comunista. No es mal sitio para él, si como se prevé, los asuntos judiciales en los que se encuentra inmerso van para adelante. Sobre todo, y muy en especial, el caso Dina, cuyo delito informático le puede costar la friolera de tres años de prisión. Y no es broma.

Lo que sí parece una broma de mal gusto, procediendo de una persona perdedora absoluta y vendida a laPesoé por menos de un plato de lentejas, es lo de Arrimadas. Desde que tomó las riendas de los Ciudadanos el partido ha ido de mal en peor, hasta llegar a esto, a no tener ni un solo representante en la Asamblea de Madrid. Ha pasado de cogobernar la comunidad a quedarse en la más absoluta miseria. Pero, siguiendo el camino de su amigo elPrepotente, esto no importa. En vez de dimitir va a revolucionar el partido y ha nombrado, porque ella misma lo ha decidido, vicepresidente del partido a Edmundo. Ya que no va a ser presidente de la Comunidad madrileña, al menos que sea vicepresidente del partido. De todas formas, no tenía mucho más donde elegir entre los cinco gatos que le quedan.

El que continúa sin abrir la boca, porque en boca cerrada no entran moscas, es elPrepotente presidente del gobierno de España. Sí, el mismo, Sánchez. Ya tendría que haber dimitido después de la patada en sus partes que le ha dado Ayuso. Es que en realidad él era el candidato de laPesoé y no el páter Gabilondo, a la presidencia de Madrid. Lo pretende todo. Pero, desde ayer las cosas se le van a poner más feas. Madrid no lo quiere, como también ha quedado demostrado que no quiere al payaso comunista. Está que brama como un toro, pero sin casta. Solo hay que oír a su ministro de Transportes y número tres del partido, Ávalos, más impresentable que él todavía. 

O a su viceministra primera, Calvo. Por la boca muere el pez. No sabe, afirma Calvo, de tabernas ni berberechos. Pero no solo no sabe de eso. Ignora los bocadillos de calamares, la tortilla de patatas -con o sin cebolla- en una hermosa terraza, con una caña, disfrutando del paisaje único de la ciudad de Madrid, incluso con una taza de café con leche, que diría la mujer de Aznar, Ana botella. De Madrid, y mucho me temo que también de España, lo desconoce todo. Lo mismo que el ignorante de su presidente elPrepotente y su mamporrero Tezanos, el falsificador de las encuestas, que ignoraba que en Madrid hubiera los suficientes tabernarios como para mandar a tomar por ciertos aires a él, a su jefe, a todo el Pesoé y a sus socios de izquierdas juntos.