Traductor

Buscar en este blog

miércoles, 8 de septiembre de 2021

Los odios y la anécdota de Marlaska

Ya ven, para el ministro Marlaska, el de los Interiores, lo que es un delito -la actuación del joven de Malasaña- pasa a ser una anécdota. ¡Acaso también fue una anécdota para este cara dura de ministro el caso Faisán! Después de tres días alimentando el odio, porque es lo que ha hecho Marlaska desde el domingo, todo viene a desembocar en una anécdota. No es eso, no es eso. Se equivoca Marlaska con esta afirmación, después de haber utilizado políticamente la mentira de un joven, cuando afirmaba tajante que íbamos a conocer quiénes eran esos ocho homófobos encapuchados que lo agredieron de manera salvaje en el portal de su casa en ese barrio madrileño.

No se puede, como hacen los revanchistas y vomitivos comunistas, culpar a un partido de ser culpable de los ataques de homofobia que se producen, se han producido o se pueden producir en cualquier parte del país. Son estos comunistas, los encabezados por la irascible -y más- Belarra, los que están fomentando el odio, ellos y los de Errejón. Tendrían que pedir perdón a quienes acusan y perdón a todos los españoles por su postura maximalista y de promoción del enfrentamiento entre españoles. Son unos guerracivilistas. Son unos impresentables, sin una pizca de educación y de respeto.

Cierto que existen sentimientos homófobos y ataques movidos por el odio. Todo ello hay que perseguido y castigarlo. Pero, es inmoral e indecente que los partidos puedan utilizarlo políticamente en su favor. Así ha sucedido con el caso del joven veinteañero de Malasaña, que el domingo denunció haber sido atacado en el portal de su casa por ocho encapuchados, que le habrían marcado con una navaja la palabra maricón en uno de sus glúteos. Al final, todo fue una burda mentira del joven, que había practicado relaciones sexuales consentidas y sadomasoquistas con otras dos personas en un piso. El joven mintió, porque no quería que su pareja descubriera que lo había engañado.

Así se resume la historia. O lo que es lo mismo, la anécdota como la califica el impresentable Marlaska, que durante tres días ha utilizado la falsa denuncia de manera política y partidista. Habrá que saber desde qué momento el ministro conocía la verdad. No es fiable en absoluto este ministro, que ahora pide no frivolizar; no es fiable en nada, como su jefe de Ejecutivo, elPrepotente, que también ha utilizado el caso para su propio provecho político. Son dos miserables, como los comunistas de Belarra y la habitante del casoplón de Galapagar.

Ya digo, nada fiables en nada. Ahora elPrepotente acusa a los de laPepé de Casado de insumisión constitucional y le urge a renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). O sea que ahora los golpistas son los de la derecha de laPepé. Pues eso, que solo le falta enviarlos al Supremo, que los juzguen como golpistas. Él, elPrepotente renovará con sus socios el CGPJ y, luego, ya veremos cómo se portan indultará a los dirigentes de la derecha. Así, todos iguales. Se lo monta elPrepotente que da asco.

No se lo monta mal tampoco, su exvice el payaso comunista. Ya está de colaborador en un medio, de colaborador, porque lo que se dice escritor nádená; junta letras y palabras, como hacen los niños. Espera estar de contertulio en una emisora de radio y en una televisión, como estrella central y principal. Esperemos que no sea en laSéptima, la que prepara Quintos. Pero, sí le han abierto un hueco en los diarios etarras Gara y Ara. No podía ser por menos. El payaso comunista jamás ha condenado a ETA y los crímenes cometidos por la banda terrorista. Y odia a las víctimas.