La manifestación reivindicativa de la asociación “Hablamos Español” no pudo concluir su
recorrido donde tenía previsto, la Plaza
de la Universidad, en Barcelona.
Los indeseables secesionistas de los CDR
–Comités de Defensa de la República-
lo impidieron. Estos independentistas, que se autocalifican de demócratas y
pacíficos, tomaron la plaza y cortaron los accesos a la misma para que los que
hablan español no pudieran expresar su oposición a la inmersión lingüística,
que más que inmersión es una imposición de los independistas, el odio de estos
contra todo lo que signifique España.