Carmen
Calvo, como el que ve llover. No ofende quien quiere sino quien puede. Para ella,
en nombre del Gobierno de España,
las amenazas del nazi presidente de la Generalidad
son nada, agua de borrajas. La propuesta del de la voz de su amo de atacar al Estado no es nada. Pero, como cada vez
que abre la boca, Carmen Calvo se equivoca. Se equivocó con lo del viaje
privado de diversión del presidente Sánchez
a Castellón, queriendo hacernos
creer que era un viaje “cultural nocturno”. O sea que nos mintió más que Pinocho. Con las intenciones de
elQuinito se vuelve a equivocar, más bien nos quiere equivocar a los demás. Y
miente.