No es una Penélope
Cruz, ni tan siquiera una Sofía
Loren –por poner dos casos-, pero eso de las cámaras y los micros y ser el
centro de atención es que le encanta. La pesoísta Margarita Robles, excéntrica y vehemente, tiene que ser siempre la
que va por delante –ande o no ande-, dando la impresión de que, en realidad, es
mismamente ella la que marca las líneas a seguir por laPesoé. Fue laRobles
uno de los primeros en invitar a elPuigidemón
–el hijo pastelero- a asistir a las Cortes
a Parlamentar; sorprendió, sí señor, porque parecía la portavoz de laPesoé y de
laPepé, y no gustó, no, que cada
quien es cada cual. Y como que laPepé iba a la rastra.