Andan estos
nacionalistas –y políticos en general- más revueltos que el tiempo. Mientras elPuchi se lo pasa a lo grande en Waterloo, poniéndose de paella hasta la
mamola, en compañía de la locuela-histérica Rahola, el Valtony ese,
el rapero huido de la Justicia
española, su abogado y el Marramala,
empresario que se está cobrando todo el dinero que desembolsó con elPuchi a su
llegada a Bruselas, el Ssnto Oriol Yunqueras tiene a rebosar su
agenda para recibir al personal en su despacho, el de la prisión, donde toma la
sombra, por su participación en el Golpe
de Estado de los independentistas.