No es una Penélope
Cruz, ni tan siquiera una Sofía
Loren –por poner dos casos-, pero eso de las cámaras y los micros y ser el
centro de atención es que le encanta. La pesoísta Margarita Robles, excéntrica y vehemente, tiene que ser siempre la
que va por delante –ande o no ande-, dando la impresión de que, en realidad, es
mismamente ella la que marca las líneas a seguir por laPesoé. Fue laRobles
uno de los primeros en invitar a elPuigidemón
–el hijo pastelero- a asistir a las Cortes
a Parlamentar; sorprendió, sí señor, porque parecía la portavoz de laPesoé y de
laPepé, y no gustó, no, que cada
quien es cada cual. Y como que laPepé iba a la rastra.
No se le logró a laRobles, que esperaba no se sabe qué
de la presencia de elPuigidemón en el Senado.
Pero, va a sr que no, y no es no. Y punto. No anda con ganas el de la Generalidad de ausentarse de su taifas,
no siendo que le levanten la silla; pero, seguro que ya está preparando otra,
la siguiente, porque el Pleno del Parlamento de allí que tenía previsto
reunirse en las mañanas del jueves y viernes, lo hará el jueves por la tarde y
la mañana del viernes. ¡Gato encerrado!
Estos son capaces de declarar la República el jueves y esa misma noche cruzar los Pirineos hacia Perpiñán, amparándose en la oscuridad de la noche. Le gustan mucho
esas cosas al hijo pastelero, como cuando el UnoaCero se cambió de coche en un túnel para ir a votar. Ha visto
muchas películas este hombre. Tiene cara de haber disfrutado mucho viéndolas,
en solitario, en la parte de atrás de la sala, en plena oscuridad.
Llegados a este punto –expresión gilipollesca donde
las haya, utilizada habitualmente por políticos y tertulianos-, fue laRobles la
que adelantaba que si elPuigidemón convocaba elecciones no se aplicaría el 155.
Otra vez, hablaba por la izquierda y por la derecha y como un lorito. Menos mal
que la pararon a tiempo: el 115 se aplicará, con o sin convocatoria electoral,
y con el apoyo o no de laPesoé; es más, cada uno de los de allí tendrá que
responder de lo suyo en este proceso, es decir que cada palo aguante su vela.
Ahora laPesoé ha quedado al descubierto. LaPesoé no es
de fiar, elPedroQué no es de fiar, elBailón Iceta no es de fiar. Ya nos gustaría ya, no tener que desconfiar de
los pesoístas, pero es que son ellos los que dan todas las pautas para que eso
suceda: un día elPedroQué se levanta siendo medio hombre de Estado –como si estuviera medio
embarazado- y al otro le oprimen las ganas y la necesidad de lograr La Moncloa, a cualquier precio, para la
mujer de rojo. Y así no podemos andar, hombre. O se es o no se es. Pero, ya
puede espabilar, que las encuestas se presentan matadoras: sube laPepé y suben
los Ciudadanos; estos se acercan
peligrosamente a laPesoé y ya sobrepasan a los podemitas.
Ya puede, ya, elPedroQué si no quiere caer en una
crisis como la de los podemitas, más profunda y oscura que un pozo. Resulta que
Carolina Bescansa ha hundido en la
miseria con dos frases contundentes a
elPabloManué: “a Podemos le falta un
proyecto político para España” y “A
mí me gustaría un Podemos que le hablase más a los españoles y no solamente a
los independentistas”. Y dijo más, pero con esto basta. Primero fue elErrejón y hoy laBescansa. Es fácil predecir que en breves habrá otros respondones
a elPabloManué, que no sale de una y ya está en otra; a las “depres” me
refiero.
Los que están eufóricos son los integrantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado,
que han recibido el apoyo del Congreso -excepto de los podemitas- por su labor,
y en especial por la realizada en Cataluña.
Lo que no se entiende es que el delegado del Gobierno allí, señor Millo,
continúe sin dimitir, o ser cesado, después de ir a la televisión golpista –TV3- a pedir disculpas por la
intervención de la policía el día del referéndum, el del UnoaCero.
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