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domingo, 19 de agosto de 2018

El viaje de la juerga


Carmen Calvo, como el que ve llover. No ofende quien quiere sino quien puede. Para ella, en nombre del Gobierno de España, las amenazas del nazi presidente de la Generalidad son nada, agua de borrajas. La propuesta del de la voz de su amo de atacar al Estado no es nada. Pero, como cada vez que abre la boca, Carmen Calvo se equivoca. Se equivocó con lo del viaje privado de diversión del presidente Sánchez a Castellón, queriendo hacernos creer que era un viaje “cultural nocturno”. O sea que nos mintió más que Pinocho. Con las intenciones de elQuinito se vuelve a equivocar, más bien nos quiere equivocar a los demás. Y miente.


Desde luego que elQuinito expresa su intención de atacar al Estado y lo ataca, en contra de la apreciación de la ministra. Lo hace de manera frontal, descarada, impune, porque está incitando a la violencia y al odio. Pero, ese ataque al Estado y a todos los españoles por parte del xenófobo no viene de ahora, es de largo, desde antes, incluso, de llegar a la presidencia de la Generalidad. Sus constantes insultos contra España y los españoles y su supremacismo culminaron este viernes con esa llamada a la resistencia y al ataque al Estado.

No es para tomárselo a broma, como parece que hace la ministra. Después de más de dos días de las inadmisibles palabras del secesionista, la ministra responde tergiversando y manipulando –eso es muy propio de la propaganda de laPesoé- para no dar importancia a la amenaza de elQuinito, de tal manera que en vez de responder con contundencia al independentista de cromañón lo que hace es exigir lealtad a los partidos de la derecha, laPepé y Ciudadanos, ante la grave crisis catalana, pero sí que permite que la Generalidad imponga multas, y muy elevadas, a los ciudadanos que quitan lazos amarillos de lugares públicos.

No está el horno para bollos, y no se pueden tomar las declaraciones del “señor bajito y cabreado”, en boca de elQuinito, como algo anecdótico y sin importancia. No es para considerarlo una broma, como no lo son las amenazas de un tal Federico Bentanachs, fundador de “Terra Lliure”, grupo terrorista –primo-hermano de ETA- que está cursando amenazas a diestro y siniestro a través de las redes sociales. Algunas de sus amenazas hasta llevan nombre y apellidos, como la dirigida a Ignacio Guardnas, que fuera diputado de Convergencia y Unión, pero que está muy alejado de la idea independentista, o las proferidas contra los mozos de la Escuadra que se consideran constitucionalistas y, en general, contra todos aquellos que no son independentistas. Tiene amenazada a más de media Cataluña, y ahí sigue.

Este terrorista presume de mantener una estrecha relación de amistad con el presidente de la Generalidad, elQuinito, con el repulsivo Juan Tardá –de Izquierda Republicana-, con el exentrenador del Barcelona, el ínclito e impresentable “chupón” Pepe Guardiola, y el cantonto y exdiputado Luis Yach. Así que, ojo, con el elemento, que allí goza de amistades influyentes, que le han concedido ya la impunidad. A lo que parece, el Gobierno de Sánchez también.

Tampoco es broma, y de esto guarda absoluto silencio la ministra mentirosa –que continúa sin dimitir por ello- que laPeneuve, en connivencia con laPesoé de allí coloque una pancarta en el balcón del ayuntamiento de Bilbao pidiendo la expulsión de la Guardia Civil de las provincias vascongadas. La cara de vergüenza debería caérsela a la ministra mentirosa y a todo el Gobierno de España, comenzando por su presidente y siguiendo por el ministro de los Interiores, Marlasca, que quién lo viera y quién lo ve.

Como tampoco debería tomarse como una broma –en este caso, igualmente, de mal gusto- el que el Gobierno declare ahora como secreto oficial, de Estado, el viaje de “placer” de Sánchez a Castellón en un avión oficial. O sea que antes era un viaje que, según la ministra Calvo, figuraba en la “agenda cultural nocturna” del presidente; ahora, el viaje ha sido calificado como secreto oficial. Se coge antes a un mentiroso que a un cojo.

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