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viernes, 14 de febrero de 2020

El contenido prohibido de las maletas de Delcy

Si no fuera porque esto es muy serio, estaríamos desternillándonos de la risa. Pero, lo que está sucediendo con el "caso Ábalos" es de suma gravedad, tanta que, en cualquier otro país de nuestro entorno, ya le habría costado el cargo no solo al ministro, sino al propio presidente del Gobierno, que tanto quiere y defiende a su ministro de los Transportes. ¡Un "mandao"! Ni se sabe ya cuántas versiones circulan -o han hecho correr los socialistas- sobre los encuentros que mantuvo el secretario de Organización de laPesoé con la venezolana el veinte de enero. Al menos dos, uno en el avión de la "dulce Dency" y otro en la sala vip de la T-1, pero no de veinte minutos, como se dijo al principio, ni de una hora, sino de una hora y media en el espacio vip. Decía el ministro que no les dio tiempo a hablar de nada. ¡Hombre, si se refiere a arreglar el mundo, pues no!

A lo que vamos. Ya se sabía algo de las maletas que se descargaron del avión de la venezolana. Pero, nadie habla de su paradero o si es que realmente existieron. Ahora ya conocemos que se descargaron cuarenta maletas, cuarenta, que se dice bien, y que se cargaron en un "amplio" coche diplomático, de la embajada venezolana en España. De su contenido todavía, ya digo, no nos hemos enterado, pero se sabrá; aunque, ya se barrunta y se especula con la "ruta del oro". Es decir, que como que se sospecha de que el régimen bolivariano que mantiene a Maduro en el poder está sacando lingotes de oro del país. ¡Vamos, como esto sea cierto, la gravedad del aterrizaje de laDency en nuestro país es todavía mucho mayor.
Pero, agárrense, el vehículo diplomático entró en el aeropuerto de Barajas sin pasar control alguno. Alguien tuvo que permitirle pasar por las pistas como Pedro por su casa. Pero, no es eso todo, tal cual entró salió -eso sí no se sabe si cargado con cuarenta maletas- sin pasar control aduanero alguno, lo cual alguien tuvo que autorizar su salida sin ningún tipo de control. O si las maletas fueron trasladas al otro avión con el que se las piró la venezolana a Turquía.
Pese a todo, Ábalos no dimite, que bien claro ha dejado dicho que él ha llegado hasta ahí para quedarse. ¡A ver quién le pone el cascabel al gato! Y Sánchez, ya se imaginan, no solo ha llegado para quedarse, sino que quiere ascender más, aspira a tocar el cielo -a lo puro podemita- con la mano: quiere llegar a ser Rey, se lo debe a la su Begoñita, quie anhela ser reina de España o la consorte de un presidente de una republiqueta, que diría Felipe González, mientras se carga a la monarquía republicana.
¡Jeje, país de contrastes! Un monarquía republicana. Así son ellos, los del Gobierno "progresista" de coalición. Ejemplo más palmario, en la ministra de los Exteriores, Arancha González Laya. Quédense con su nombre, porque dará para mucho. Ni más ni menos, la ministra ésta, que vaya usted a saber en dónde y qué estudió, afirma tajantemente y convencida del todo -¡lo que hay que ver!- que el venezolano Guaidó, al que se negó Sánchez a recibir, es presidente de Venezuela y, a la vez, jefe de la oposición. ¡Manda güevos! Así no contradice a su jefe Sánchez, que lo rebajó a jefe de la oposición; pero, también, lo deja "pal" arrastre, porque lo considera presidente, a Guaidó. Como el de la pata de palo, cuando quiere es pirata, cuando le apetece es el comandante.¡Jesús, Jesús! Todo gracias a la ministra Laya.
Y lo que nos faltará por ver. ¡Uy, lo que veremos! Pues, por ejemplo, cómo la ministra de Trabajo y elViceDos, elPabloManué, ambos comunistas, les daban por donde se comienzan a hacer los sacos a las organizaciones agrarias. La ministra había convocado una reunión para por la mañana -porque ya saben que el campo está que arde- y va la señora y la suspende. Deja en la calle y con la boca abierta a las asociaciones y organizaciones agrarias como ASAJA, COAG y UPA y se reúne con los sindicatos, que poco o nada tienen que ver con el agro, UGT -el primo hermano de laPesoé- y CC.OO, el de los comunistas. De vergüenza ajena dicen los de las organizaciones agrarias. Pero, ya digo, los del gobierno "progresista" son así. 

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