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jueves, 22 de enero de 2015

Zapatero sigue en el PSOE, pese a su traición

De verdad, cada vez que pienso en ello, más contrariado estoy. Esto de José Luis Rodríguez Zapatero -ZP- me parece que no sólo es grave, sino muy grave, gravísimo. Sí, sí lo es para su partido -el pesoé- y para la ciudadanía en general, como dirían los políticos. Sólo a un energúmeno se le puede ocurrir -¡bombilla!- ir a parlamentar con el enemigo, a espaldas de su jefe. Esto es como si un padre va a hablar con el tutor de su hijo para ver cómo le puede catear el curso. Lo que hizo ZP -ya en diciembre, aunque se ha sabido ahora- con su "compi", José Bono, es una traición en toda regla. Ambos dos son despreciables. Tendrían que irse del partido.A medida que se van teniendo más datos, este encuentro resulta más indignante. Si fuera militante del pesoé, estaría avergonzado, abochornado y, por supuesto, indignado. De verdad. Es como tener a la zorra dentro del gallinero. Va a destrozar a todos y, encima, para nada; sólo por el afán de hacer daño, que bien lo sabían cuando lo tramaron. Porque eso es lo que es, una verdadera trama, que iban a dar a conocer -a filtrar- en el momento adecuado, para ellos, por supuesto. ¡Qué bellacos!¡Qué indignos!
Es que ya se necesita, convocar una reunión con "elbarredor", Pablo Iglesias, e Íñigo Errejón, los mandamases de Podemos, sin comunicárselo al secretario general del partido, Pedro Sánchez -hoy no escribo ¿qué?, no hace para ello; disculpen-, pero, para más escarnio la entrevista la auspició el propio Zapatero -no sabemos si con instancia-, mientras que el otro impresentable, egggministro de Defensa, ponía la casa, el té y la cama. Por cierto, este paisano -me refiero a José Bono- todavía no ha aclarado, ni de lejos, de dónde le salieron tantas posesiones y caballerizas, por ejemplo. Seguimos egggperando
Si es que -¡manda huevos!- ayer mismo va a su emisora amiga, de él, a decir que aquí la única que vale para algo es la del taifas de Andalucía. Qué situación tan embarazosa para ella, o acaso es que Susana Díaz ya sabía lo de la conspiración, y todo iba en el mismo paquete. Pero es que el "desalmao", en ese mismo momento, a través de la alcachofa radiofónica, difundiéndolo a los "cuatro vientos", osa pedir "lealtad" a Pedro Sánchez. No se puede tener una cara más dura. Y para rematar la estupidez, sentencia que Sánchez no tiene experiencia de gobierno y sigue sin tener un proyecto.
¡Jesús, Jesús! Hasta dónde ha llegado este hombre. Seguro que el bambi ZP tenía mucha experiencia cuando llegó a la presidencia del Gobierno de España. Si se había pasado más de catorce años sentado en el banquillo, en el del Congreso de los Diputados, como parlamentario de número, sin abrir la boca ni tan siquiera una vez. Eso, sí, conspirador de provincias, nato, en León y en Valladolid, por donde tienen memoria amarga de él. Este hombre está tonto, o se está volviendo loco, o es que es malo, malo, malo; el más malo de los malos, con mala entraña. No es la primera vez que traiciona, y de esto podría hablar Maragall.
Y todavía hay gente de la actual ejecutiva del psoé que dicen que el caso es que esta reunión no les ha sentado del todo bien. -¡Joer, pues no sé yo a quién le ha podido sentar bien!- No, si es que son así estos del psoé, porque hay hasta quien dice que es algo normal, que no tiene importancia y que ZP está en su derecho. Ya.
Si ellos lo dicen, será que es así, qué le vamos a hacer. Ahora, que si yo fuera Pedro Sánchez, secretario general del psoé, el partido del Iglesias de verdad, ya estaba preparando el expediente de expulsión de estos dos traidores, maquinadores de caca. Vamos, que sí, con un par de pelotillas. De tirados al río, Pedro. Debería echarlos, Pedro. El partido no va a perder nada sin estos dos.

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