El Premio de la Princesa, un esperpento

Que les digo que cada día entiendo menos este nuestro país, que, si me permiten decirlo sin que tenga que sufrir alguna represalia, se llama España. No acabamos de salir de una y ya estamos en otra. "Pamí" que lo hacen adrede. Hoy se ha fallado el Premio Princesa de Asturias del Deporte y, como se sabe, ha recaído en los hermanos Pablo y Marcos Gassol. Ambos dos juegan en la NBA y ambos dos son jugadores de la Selección Española de Baloncesto; también, ambos dos, se mostraron -sin tapujos- a favor de la celebración de la consulta independentista del 9N. !Está triste la Princesa. Pobre Princesa. Qué tendrá la Princesa!

Días antes de la ilegal y chapucera consulta soberanista del 9N, los dos hermanos hablaron "abiertamente" tras un ágape celebrado en la Cámara de Comercio de Barcelona. El pequeño de los Gassol decía que "a título personal estoy de acuerdo con la votación", mientras que su hermano, el mayor, opinaba que "todo el mundo debería tener el derecho de poder decidir su futuro". Pena, hombre, que ambos dos se olvidaran de que también estamos los demás, es decir, todos los españoles, que también tendremos algo que opinar, y si no que nos den por donde se atan los sacos, digo. Sólo fue un pequeño detalle, un pequeño olvido sin importancia. Da igual, porque aquí todo da igual. Si a ambos dos se les ocurre decir en los Estados Unidos que son partidarios de una votación para la "desmembración" de un Estado, los corren a "gorrazos" ¡Mira que querer estropearles las "barras y estrellas"! Aquí eso se premia, como a los mezquinos  y repudiables jugadores de la selección española de Fútbol: Javi, Piqué, Iniesta -y éste más grave todavía, no es catalán- y otros innombrables, que se han cotizado y forrado vistiendo la camiseta española. Claro, que así nos va. Si es que además es la segunda vez que se lo dan; podrían promocionar a otros, que los hay.

Ah, si quieren una entrega más esperpéntica que la concesión del premio, que no se olviden los organizadores, el día de la entrega, de que suene "Los segadores"; al menos nos evitaremos otra "pitada", y tampoco se olviden de invitar y colocar en lugar de honor al delincuente Arturo Mas, al que, previamente, puede acercar el Rey en su coche. Es más -acentuado-, se me ocurre que el próximo premio, por la promoción de España -aunque sea hablando bien- se lo podrían conceder al delincuente Mas, que nos pone  a España de país de terroristas para arriba, por donde quiera que va en sus viajes de Estado. O mismamente que se lo otorguen a elGorilados, Nico Maduro, el de Venezuela, que también habla mucho de España; cuando sea el caso, ya sé yo quién será el invitado de honor. Démosle tiempo al tiempo.

Esto es como lo de Pedro Sánchez, el del pesoé, que llama al Rey para solidarizarse con él después de la "pitada" al Himno Nacional de España en el Campo Nuevo del Barcelona. !Sombrero! Y luego llega el portavoz del partido de los socialistas en el Congreso de los Diputados y dice, muy ufano, que la "pitada" sólo es la manifestación de la libertad de expresión, con lo que  ya tenemos otro, que confunde las churras con las merinas, candidato a formar parte del rebaño, a la vez que deja en muy mal lugar a su jefe, elSánchez, que se apresura a decir, sonrojado, que la "pitada" es sólo una falta de educación. !Falta de seso es lo que tiene él! Así le va. Señor elPedro, ignora que el Cantábrico está en el norte -"parriba"- y el estrecho de Gibraltar al sur, "pallábajo". Eso es, para la Andalucía, que se le viene encima. Pero es que tampoco sabe lo que tiene al lado. La ignorancia es muy atrevida. Pero hace felices a algunos. Sí, eso, sí. Pena que no vieran con qué respeto escucharon los italianos el Himno de España cuando contador ganó el Giro, y es hace sólo unos días.