Día aciago para el delincuente

Hacen un tiempo se iban de paseo en coche, sin importarles el qué dirán. Desde hace unos días han pasado del amor al odio. Mire el señor Rey que se lo advertimos. Cuidado con las compañías, que por querer hacer volver al redil al hijo descarriado está haciendo de menos a todos los demás, que no es trigo limpio, que es un delincuente con mala prosapia y se la va a pegar en cualquier momento. ¡Ni caso! Pues ya lo ve, le quiere quitarle una pata al trono, que ya se lo dijo, sin rubor, en La Zarzuela.

Menudo carigesto tenían ayer los dos, tanto el señor Rey como el delincuente Arturo. Se cortaba la tensión. Ante todo el personal importante de las leyes, se la tiró el Rey, también sin rubor. Si es que Arturo no cumple las leyes, que hay que respetarlas siempre, que no vale la “pata de palo”. ¡Hombre, es que, si no, para qué están! ¡Y, macho, te has pasado y te preparas para armarla! ¡Así no se juega!

No, si ya sabemos que de sorpresa no le cogió la reñileta, que se la esperaba; pero, coño, a nadie le gusta que le saquen los defectos, ya digo, delante de todos, y más cuando hasta hace poco el señor Rey y el delincuente Mas eran amigos, como se dice en Facebook. Y si era poco, la terminó rematando el señor presi del Tribunal Supremo, que lo es a su vez del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, que les recordó a los recién inaugurados jueces que no “hay democracia sin respeto a la Ley” y que no se prospera con enfrentamientos y conflictos interminables. Sólo le faltó añadir ¡Leches! Seguro que a más de uno le habría quemado el sillón el culete.

En estos casos hay que ser contundentes y mostrar autoridad. Pero no sé yo, no sé. Porque el delincuente parece que no se daba por enterado o es que quería jugar al despiste. Terminado el acto oficial de entrega de despachos a los nuevos jueces españoles comentaba a todo aquel que lo quería oír que “nunca nos hemos saltado la ley”. Daba la impresión de que hasta se lo creía.

Desde luego, ayer no fue el día más preclaro del delincuente Mas. Además de sacarle el señor Rey los coloretes y crecerle un poco, más la nariz por mentiroso compulsivo, el número uno de su lista secesionista –integra toda ella por delincuentes- ponía en duda que el delincuente mayor, es decir, Arturo Mas, vaya a ser el presidente de la Generalidad, en caso de ganar las elecciones. Ya tiene, el primero con la primera en la frente. El tal Raúl Moveda le ha salido “bragao”. A ver qué tal le sienta, esa chinita –de piedra- en el zapato. “Juntos por el sí”.

Por si fuera poco para el delincuente, ayer también se supo de la detención de tres miembros de la familia Sumarroca por facturación fraudulenta. Los Sumarroca –de toda la vida- son hijos de Carlos Sumarroca, que fuera cofundador del partido del delincuente Arturo, Convergencia Democrática de Cataluña (CDC), y se da la circunstancia de que un hermano de este tal Carlos está imputado por el caso abierto contra Jjjordi Pujjol Ferrusola, hijo de Jjordi Pujjol, que fuera presidente de la Generalidad catalana y padre político del susodicho delincuente Arturo Mas. Si es que el mundo es un pañuelo, y Cataluña, con todo respeto, un moquero para todos estos.

La otra cosita que ha amargado el día al delincuente ha sido la sanción de treinta mil euros que la UEFA ha impuesto al Barcelona Club de fútbol, por pasarse los aficionados con tanta bandera estrellada y cánticos independentistas en la final de la Champions, que se celebró en junio, pero -¡Pásmense!- en Berlín, es decir en la Alemania de los alemanes. Los de la Comisión Antiviolencia en España ya están tardando en sentenciar por la “pitada” al Himno de España en la copa del Rey en el Campo Nuevo del Barcelona, donde se “espitorraba” el delincuente. El camino ya lo tienen expedito los de Antiviolencia. Seguimos esperando el dictamen de los incompetentes mejor pagados.

De la chorrada del día destaca la cara dura de la “podemita” Teresa Rodríguez. La andaluza tuitea que “el desalojo decretado por el presidente del Parlamento de los alcaldes de IU me parece una barbaridad, sin paliativos”. Los alcaldes se encerraron en el Parlamento andaluz reclamando unas subvenciones que no llegan. El grupo parlamentario de los “podemitas”, que lidera Teresa, votó a favor de que fueran desalojados por la policía. Ya les digo, que de estos, la mentira como norrma.