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lunes, 11 de abril de 2016

La papela de Soria y el salto de Conde

Aquí, últimamente, nos movemos de brincos a saltos. Como cabras, dicho sea, y entendido, en el buen sentido de la palabra. El exbanquero, exrecluso y exdoctor honoris causa, me da a mí que pronto va a poder visitar a sus antiguos amigos de patio, en la sombra. O no. Tenían que haberle dejado un poquito más de tiempo -controlado, como si nada- para ver si en vez de los trece o catorce millones de euros "repatriados" se multiplicaban como los panes y los peces. Coñe, que no todos los días el que arrampló la pasta la devuelve, aunque sea un decir, a su país de origen.
La verdad es que la detención nos ha cogido a casi todos por sorpresa. A él, a Mario Conde, quizá no. Porque, siendo como es el pájaro, seguro que algo se venía sospechando, y, a caso le haya merecido el riesgo. Pero, ya ven, como se decía antaño en la radio, el "criminal nunca gana". Han tenido que pasar bastantes años, tantos que sus hijos ya están creciditos e imagino que preparados y concienciados para acompañar a su padre en sus correrías económicas y, puede ser, las de intramuros.
Eso, que un brinco para un lunes. El salto lo daba el ministro Soria, José Manuel, que no es soriano. De entre los de los "papales de Panamá" allí aparece él. ¡Jesús mío! lo que les faltaba en estos momentos a los peperos. No han terminado con el caso de Rita Barberá y ya abriendo el de un ministro. No dan abasto. ¡Para que luego digan que no se mueven! Al contrario que la valenciana, que sigue ventilándose por el caloret -nosotros decimos la calor-, el ministro Soria no se ha quedado callado. Jura y requetejura que no tiene nada en Panamá, ni siquiera una tía abuela, que emigrara de jovenzuela, si acaso un tío en América. ¡Pero, quién no tiene un tío en América!
Los peperos, a través de su portavoz Casado -que el hombre se las come todas, es su sino-, considera satisfactorias las explicaciones del ministro Soria, porque, además, ha pedido una "rogatoria" a Panamá con el fin de que las autoridades panameñas certifiquen que su nombre no figura en sociedad alguna de ese país.
A ver si los panameños pasan el certificado -siempre que puedan- que pide el ministro y se aclara todo. Porque, mecachis, tiempo le ha faltado a los de la oposición opuesta al partido del Gobierno de elMaryJoy para pedir la dimisión del ministro y que dé una explicación en el Parlamento. El portavoz de laPesoé lo pedía con manifiesto cabreo, como si se estuviera dirigiendo, curiosamente, a elBarredor, por frustrar el llegar a un acuerdo de "Gobierno progresista". Teniendo como tienen los pesoístas eso de los "eres", no está mal que pidan la dimisión de Soria, que no digo que no, pero, hombre con un poquito de pudor. No se coman el jamón, cuando el gorrino todavía está danzando por la dehesa.
Tampoco se han quedado para atrás los podem(K)itas, en eso de pedir la dimisión. Pues, no tienen estos nada que lavar, desde los dineros de Venezuela, pasando por los de Irán, los muy posibles de Rusia y de Bolivia y Colombia -que todo se sabe, son máquinas de fabricar en efectivo-, y los dineros de los sueldos -se están haciendo todos ricos y de la casta-, hasta los enchufes descarados y concesiones -por valor de los 17.000 euros- a empresas. Y la más de las mases, la concejala de laSeñáManuela, Rita Maestre, la asaltacapillas, la musa de Luis María Ansón, al que coloca-, condenada -y confesa- por la Justicia. Y ahí siguen todos, tan panchos. 

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