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viernes, 4 de octubre de 2019

El jamón serrano que lo roa Sánchez

Lo de este hombre es imperdonable. ¡Mira que confundir el sabor del jamón ibérico con el delserrano! Semejante incultura no tiene nombre. Bueno, sí, para que nos enteremos de que ha sido Sánchez, el ignorante. Lo es en casi todo. Hasta en no sabe “colar” una tesis plagiada. Ya le vale al tipo, por lo de la tesis y por lo del jamón. ¡No les digo ya más, si algún día prueba el de bellota! Nos arruina el mercado. Él, tan orondo. Y lo dijo en Extremadura, tierra de conquistadores y del buen jamón, donde lo “haiga”.  Y la barbaridad la cometió en Zafra.

Ya me dirán, que entre Zafra y Huelva y su sierra de Aracena y el Repilao se concentra el buen jamón de bellota, el ibérico y, hasta si me apuran, el serrano, que ricos los hay también ¡Que Sánchez nos cierra el mercado es un hecho! Porque dijo que cuando recibió al primer mandatario chino, el de la China mandarina, donde hay tantísimo personal, potencial consumidor de jamón, va y les vende el serrano. Son muy educada esa gente, y seguro que por no llevarle la contraria a su anfitrión el mandatario chino se lo comió, que a él no le dan gato por liebre, ni serrano por cebo. De todas formas, que se quede Sánchez con el jamón del marrano blanco y que nos deje para nosotros a buen precio el de cebo y bellota, y, si a mal no viene, aunque sea, un “cinco jotillas”. No le vamos a hacer ascos.
Están los extremeños encabronaos con Sánchez, y quieren invitarlo a comer jamón jamón, para que se entere de lo que es bueno. Ahora que, más tontos son ellos. Una vez que ya ha hecho el mal que con su pan se loma el serrano. Y el de cebo y bellota para el primer mandatario chino. A ese sí que merece el esfuerzo invitarlo. Para que se quite de la chola el estereotipo que le vendió Sánchez con el serrano y porque el chino es un mercado potencialmente inmenso. Que en china hay mucho chino, más que en España. Aunque parezca mentira.
Y mucho político listo, o listillo, o “espabilao” lo hay en nuestro país. Además del ejemplo de Sánchez está el caso del nazi xenófobo presidente de la Generalidad catalana. Sí que se ha dado prisa en esta ocasión de retirar lazos y pancartas de las dependencias de la Generalidad en toda la región autónoma española. Sí, porque se lo había ordenado la Junta Electoral Central, como antaño. Cierto que casi ha agotado el plazo, pero esta vez ha obedecido. Por la cuenta que le tiene al pavo. En breves será juzgado por la desobediencia anterior y, como en las obras, se sabe cuándo comienzan, pero no cómo y cuándo terminan. No las tiene todas consigo el secesionista y se puede encontrar con un disgusto inesperado. Eso, sí, por gilipollas.
Es que asemeja como que a todos estos independentistas, secesionistas, golpistas y terroristas lo son por gilipollas, o lo es lo mismo: además de gilipollas se convierten, en ocasiones, en delincuentes, delincuentes de mierda. Si no, ya medirán sobre los terroristas de los Cederre, que van a alegar el arraigo, como base fundamental en su solicitud para que el juez los libere de entre los barrotes. O sea, y en conclusión, no existe peligro alguno de fuga, porque los terroristas encarcelados tiene familia y un gran arraigo social en Cataluña. ¡Se necesita ser tontos!
La verdad, pobres defendidos y con qué argumentos. Que le pregunten a los encarcelados por el referéndum del UnoaCero si no tenían arraigo. O mejor aún, que se lo digan al fugado elPuchi, a Comín y a la cupera Ana Gabriel o a la secretaria de los republicanos catalanes, Marta Rovira. Los unos están en Bélgica y los otros en Suiza. No es por nada, pero buenos precedentes tiene el juez para denegarles la libertad.

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