El juez y el concejal antisemita

Curioso, pero real. No llevaba ni horas nombrado viceministro de Transportes, y dimitió. Dimitris Kamenos, griego él, del recién elegido Ejecutivo del "podemita" heleno Tsipras, se fue por pies. Pues, por nada, porque ese mismo día se supo -qué mala es la gente, quién sería el filtrador- que este sujeto transportista había realizado en su cuenta de Tuiter comentarios antisemitas, racistas y xenófobos. Como el que no hace la cosa, el muy cuco, se lo tenía bien callado. Son muy astutos estos del ala de la extrema izquierda.

Cuando los asesinatos de las Torres Gemelas, no se le ocurrió otra cosa a este hombre que predicar a los cuatro vientos que ya le parecía a él raro que no hubiera allí, en los edificios, ningún judío, pese a la gran cantidad de ellos, de judíos, que trabajaban allí. Dicho y hecho, alguien que se las tenía juradas le ha recordado en público sus comentarios, esas barbaries antisemitas. Aunque dice que esos comentarios no son suyos, sino de algún colaborador, porque a la cuenta de Tuiter tienen acceso otras quince personas. Sea cierto o no -para otra vez que se busque otros ayudantes en quienes confiar-, el viceministro por horas se fue por donde vino.

Parece que esta gente "podemita" como que tuviera fijación con los judíos, oigan. No nos hace falta ni salir de casa para encontrarnos aquí a otro que tal baila, pero que tiene la cara dura de no dimitir, y su partido, y el su jefe de Pueden, elBarredor, no sólo no se lo exigen sino que lo apoyan.

El "podemita" en cuestión llámase Guillermo Zapata y es concejal del ayuntamiento de la señáManuela, la de Madrid. Es jefe de uno de los distritos más pudientes de la capital de España, y maneja mucha mucha "pasta". De los judíos dijo que era capaz de meter a más de cinco millones de ellos en el cenicero de un "Seiscientos" y de las víctimas de la banda mafiosa y terrorista etarra y de las tres niñas cruelmente asesinas en Alcaser afirmaba que iban a cerrar el cementerio de esa localidad para evitar que Irene Villa fuera en busca de repuestos. Pues, "velahí", con puesto -y bueno- y lo mismo nos da que tenga o no novia, el caso es que ahí sigue, sin dimitir como jefe de distrito y sin renunciar a su acta de concejal. Y el juez Pedraz ni lo llamó a declarar. ¡Qué vergüenza, para el juez, quiero decir!

Pero, el muy malandrín del concejal -pese a tener por amigo al juez- no se va a librar en esta ocasión de sentarse en el banquillo, con o sin "paseíllo del Telediario", como decía elPedraz que se lo quería evitar; porque, hombre, después de todo, hasta casi era él la víctima, el concejal. Este privilegiado, el concejal, repito, no se va a librar, porque el fiscal ha recurrido el auto del descarado Pedraz y -según informa el diario "La Razón"- la Sección Segunda de la Sala Penal de la Audiencia Nacional -¡Puuff!- va a admitir la petición del fiscal.

El asunto no podía quedar así, no podía ser de otra manera, que el concejal se quede sin pena -sería cruel negársela- o al menos que el juez lo llame a declarar, cosa que no hizo elPedraz, lo que estuvo muy feo y muy mal. Ahora, que se trague el sapo, el juez, y si tienen que penarlo a él también, pues que pene. En cualquier caso, el mal ya está hecho, y sin dimitir siguen el juez y el concejal. Podrían tomar ejemplo del griego.

-- Por fin desalojaron a los impresentables que vivían acampados a la puerta del ayuntamiento de la señáManuela: los antisistema y los neonazis. Fue de madrugada, con nocturnidad y premeditación. Los echaron a todos, aunque los "podemitas" sólo querían que se expulsara a los neonazis, los otros no les estorbaban, lo de la extrema y más izquierda. Salomónicos ellos, o no.