El Rey nos la vuelve a jugar

Sigo sin entender las actuaciones del nuestro Rey, Felipe VI. Hoy viaja a Barcelona y lo primero que hace es saludar afable y sonriente al delincuente Arturo Mas, que ayer, con su actitud -otra más de las suyas- menospreció a toda España con su no asistencia a la celebración en Madrid del Día de la Hispanidad. Bien es cierto que ni se quería su presencia -¡un delincuente en la capital  de la Villa y Corte!- ni se le esperaba. Pero el hecho es el hecho, el del uno y el del otro.

De nuevo el nuestro Rey nos ha dejado a todos patidifusos con el estrechamiento gentil de manos con el delincuente, mientras toda España, el día después, asiste atónita a este encuentro. Vale que el Rey le advierta que hay que cumplir las leyes, que si no así no vamos a parte alguna, pero otra cosa es que nos tome a los demás por el aparato con el que pita el sereno. Ustedes, perdónenme que insista, pero no lo entiendo, porque Su Majestad podía haber asistido al "XVI Foro Iberoamericano", pero no tenía que haberse encontrado con el delincuente, y mucho menos saludarlo, y mucho menos hacerlo de manera afable y mucho menos sonriente. Al enemigo, ni agua. Que me lo expliquen.

Tampoco entiendo mucho que a estas alturas del proceso los jueces del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) se asombren  del acoso al que los están sometiendo los nacionalistas-separatistas-sediciosos-golpistas. No sé qué otra cosa podían esperar, que no fuera otra que "cuestionar la legitimidad de los jueces e influir en su toma de decisiones".

Si es que estaba "cantao". Ahora se dan cuenta los jueces del más Alto de los tribunales catalanes de que estos elementos vienen poniendo en entredicho no sólo la independencia judicial, sino "todos los fundamentos esenciales del Estado Constitucional", lo que, en cualquier caso "resulta todavía más inadmisible cuando responde a una estrategia favorecida, diseñada y encabezada por representantes públicos, algunos con funciones de gobierno". Y tanto, que el delincuente Mas es el máximo responsable del Gobierno de España en Cataluña, por si lo dudaban. Y también el máximo traidor, que juro cumplir y hacer cumplir la Constitución. Y, por tanto, el máximo responsable del Golpe de Estado, que, de hecho, se ha producido en Cataluña, alentado y guiado por el.

Ahora parece que sí, que las cosas eran de otra manera, diferentes hasta como en este momento la shabían visto los señores magistrados. Y que no digan que nadie los avisó, como al Rey Sancho, que algunos se han desgañitado hasta quedarse afónicos o se han tenido que callar acosados y amedrentados por estos, que lo son también, mafiosos libres de toda culpa.

Además de todo eso, que lo sepan, son cobardicas. Resulta que nadie dijo nada a nadie, ni nadie dio órdenes a nadie, sólo que acaso, buen puede ser, pero responsabilidad y culpa "nádená". Veremos si pasado mañana el delincuente -que le toca- mantiene que si hay que responsabilizar a alguien por el 9N es a el. Si lo mantiene, pues aplíquesele la Ley en toda su contundencia y quítenle el pasaporte, que tiene mucho dinero fuera, más que suficiente para vivir bien. Si lo hubieran hecho antes nos habríamos quitado todos problemas de encima y el que "se mueva no sale en la foto".

-- El sindicato "Manos Limpias" ha denunciado a Viyi Toledo, acusándolo de "ultraje a España". Vaya, menos mal que alguien hace algo productivo, porque los maños parece que ni se han inmutado, después de que se hiciera sus necesidades en la su santa patrona la Virgen del Pilar. El odio con el que profirió sus "cagonadas" le impiden levantarse de la cama, porque se escagarrucia todo el. Y huele, sólo verlo en fotografía, que apesta.