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domingo, 22 de noviembre de 2015

La "vice", sin novio con quién bailar

Ahí va, la "vice", Soraya Sáenz de Santamaría, menuda calorina se pasó el viernes . Ella, que se hacía con buena mano en "El País" y resulta que el jefe, Juan Luis Cebrián, le ha salido "bragao". El periódico pone a parir al Gobierno de España y la "vice" al periódico. Hay, desde luego, amores que matan. El periódico afirma que el Gobierno dice Diego donde dijo digo y la "vice" que eso es una mentira cochina y gorda, "tóinventao". Y todo porque titulaba el periódico que el Gobierno se ofrecía voluntario para relevar a los franceses en África.
Entendámonos, el Gobierno en sí, como tal no era el que se proponía, sino que le ofrecía la permuta de tropas al Gobierno galo en África; eso era lo que daba España, las tropas, según entitulaba el periódico. ¡Leches, cómo se puso la vice en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros; eso que ya habían desmentido a primerita hora de la mañana la información desde La Moncloa. Pero, no, tuvo la "vice" que remachar, y que quedara claro: "esa hipótesis no está encima de la mesa. Ni se nos ha pedido ni la hemos ofrecido".
Más claro, agua. Vamos que como lo de Armada en la Casa Real: "ni está ni se le espera". Claro, la reacción del "supersoberbio" Cebrián no se hizo desear. Al día siguiente ponía al Gobierno de vuelta y media, "paparir". O sea que el Gobierno no sabe ni lo que dice -por las declaraciones de Margallo la noche antes en "13TV"- o que han engañado al medio "altas fuentes oficiales". Es muy sencillo, que diga el periódico -si se consideraba engañado- quiénes son esas altas fuentes. Del ministro, ya se sabe, por la boca muere el pez y buenos nadadores quiere el río.
Por lo que se ve, por lo que se dice y por lo que se oye, el romance entre la "vice" y "El País-Cebrián" toca a su fin, aunque sólo será pasajero, siempre que los "peperos" vuelvan a gobernar. Si es que es siempre más de lo mismo, y no espabilan. Es que los medios de las izquierdas siguen siempre la misma táctica con los gobiernos de las derechas, que es que se les ve venir desde lejos, menos los interesados, que padecen miopía crónica.
Mientras no tengamos elecciones a la vista, todos tan contentos. Desde el papel alaban a los gobernantes, mientras que estos se sienten contentos y satisfechos, hasta desprendidos económicamente, hasta tal punto que, ya saben, el Gobierno -en su defecto la "vice"- no se ha parado en barras para ayudar al periódico a salir -que no superar, eso sólo lo solucionan con la ayuda del Altísimo- del más que hondo, profundo, bache económico. Y santas pascuas. Hoy por mí, mañana también por mí.
Ahora bien, en llegando el tiempo electoral, para quieto, amigo, que hasta aquí hemos "llegao". Lo que viene ahora son palabras mayores. ¡Los chicos con los chicos, las chicas con las chicas! O sea, que cada uno por su "lao". ¡Hasta más ver! O sea, que la "vice" -en su defecto, el Gobierno- compuesta y sin novio con el que echar un baile.
Eso es así, para que se entere la "vice". Porque, mientras ella ha estado tonteando con las hienas -como diría el separatista catalán Homns-, otros, se han estado batiendo el cobre, sin medios, pero sí con ideas, defendiendo un modelo de sociedad. Lo único que han sacado en limpio, además de sin sabores y desprecios de los "peperos" -que lo sepa la "vice" y que lo haga extensivo al Gobierno todo- es el abandono en la cuneta, algunos muy mal heridos y desamparados. Luego, que no se santigüe, la "vice".

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