Atentado contra España

De nuevo un atentado terrorista se inmiscuye en el periodo electoral español. Primero fue el 11M, con la masacre en los trenes de Madrid; ahora, el atentado contra la embajada española en Kabul, en el que han resultado muertos dos policías nacionales españoles. En ambas ocasiones el candidato del Partido Popular a la presidencia del Gobierno de España es Mariano Rajoy, con la diferencia de que con los trenes no tuvo que gestionar la "crisis", mientras que en el de ayer fue el que anunció la comisión del mismo y la muerte de un policía.

Cuando ya de madrugada se supo de la muerte de otro agente español, el Gobierno de Rajoy reconoció -al menos, eso parece- que el atentado era contra la embajada española, es decir contra España. A diferencia de lo que le sucedió a Aznar en el 11M, Rajoy cuenta con el apoyo de los principales partidos políticos, que hoy se reúnen en el denominado "Pacto antiyihadista", que no ha asumido -no lo firmó- el partido de los "podemitas", pero que, curiosamente, puede estar presente en el mismo -también lo quiero para mí-, como "observador". La gracia se la ha otorgado Mariano Rajoy, para que no se queden desligados. El presidente se ha equivocado: o se está o no se está; si a elBarredor no le convencen los valores que defiende el "Pacto", debería renunciar a estar en él, tan siquiera como observador. Él, no lo niega, está en el legado del ¡No a la guerra! de la plaza del "Reina Sofía". Los "podemitas" sólo quieren, ellos solos y para ellos solos, el su "Consejo de la Paz". Que con su pan se lo coman. Y que a Rajoy se lo agradezcan. Ya veremos cómo, y qué decide el "Pacto antiyihadista".
No importa ni lo que diga ni lo que haga el "trilero" de elBarredor. La idea sobre el terrorismo la tiene muy clara, justificando las acciones de la banda mafiosa y terrorista etarra, facilitándole la gobernabilidad de ayuntamientos en el País Vasco, apoyando a los criminales encarcelados y menospreciando a las familias de los asesinados y yendo en coalición con los proetarras de Bildu a las elecciones del 20D. Huelgan más comentarios.
No en vano, y de manera airada, vehemente, el exlendakari socialista Patxi López -ya conocido el atentado de Kabul- se preguntaba en público que en dónde estaba elBarredor, cuando los socialistas -con muchos militantes asesinados por ETA- trataban de acabar con el terrorismo etarra. No esperó Patxi una respuesta, se la dio él mismo: Pablo Iglesias estaba en las "erricotabernas", con los de Herri Batasuna, orgulloso de compartir con ellos unos "chiquitos". Aunque no deja de llamar la atención, por otro lado, que Eduardo Madina, su compañero de partido, de Patxi, pidiera ese mismo día, pero en otro foro, la libertad del etarra Otegui, porque las cosas, considera, han cambiado en el País Vasco, tierra esta, ni ninguna otra, que no volverán a ver los que fueron asesinados por los etarras, se le olvidó decir.
El socialista Madina -que padeció en sus propias carnes un atentado de ETA- tampoco recuerda que los etarras mataron a mil personas y que todavía hay más de trescientos asesinatos sin resolver y por los que penar en prisión. Los que los cometieron tienen que pagar por ello; no hay prescripción.