Que
es que nosotros no somos políticos. Que es que somos unos ciudadanos normales y
corrientes, a los que nos asaetean con impuestos desde todas partes. Pero,
cumplimos. Y votamos cada cuatro años, aunque ahora nos lo permitan cada seis
meses, como sigamos así. Viene esto a cuento de que si jueces y fiscales
quieren hacer política, que abandonen la judicatura y se enfrasquen en ella.
Están en su derecho. Pero que no vayan en la procesión y se dediquen a repicar,
que hay que subirse al campanario y desde esas alturas no se pueden portar las
andas del santo. ¡Coño!
El
juez y los fiscales -dos, por falta de uno- están en que no se puede acusar al
delincuente y golpista, expresidente de la Generalidad
de Cataluña, Arturo Mas, de
malversación de fondos públicos en el caso del referéndum del 9N, auspiciado desde el Gobierno catalán. Pese a la prohibición
del Tribunal Constitucional, el
referéndum -aunque fuera realmente una patochada- se celebró. Para el juez y
los fiscales, para ellos tres, no hubo delito de malversación de fondos
públicos ¡Por qué, por qué! Porque si el chorizo Mas y sus colaboradores fueran
acusados de malversación correrían el riesgo de ir a la cárcel. Ahí está el
meollo de la cuestión. Si el Instructor
y los fiscales dicen que el delincuente no malversó fondos públicos, que venga Dios y lo vea y que los haga entrar en
razón, porque parece que el calor los ha ofuscado en lo contrario.
De
lo de inhabilitación, parece que el caso sigue para adelante, hasta que los de
la judicatura se encuentren con otro impedimento, y vuelta a empezar o a
terminar del todo. Caso cerrado. Hombre, que es que ya vamos para dos años de
marear la perdiz, que ya está bien. Alguien, cualquiera en su caso, ya estaría
penando entre rejas e inhabilitado de por vida. Por favor, que dejen de enredar
y, a lo que vamos, al grano, que el delincuente golpista de Arturo Mas se está
embolsando al año más de cien mil euros de los impuestos de todos, con derecho
a una oficina, secretaria y coche oficial.
La
verdad, hay que reconocerlo de nuevo, que esta gentuza se las sabe buscar muy
bien. También, es cierto, hay que valer para ello y tener poquitos -o, quizá,
mejor, ninguno- escrúpulos y un buen paraguas por donde resbale todo lo que
cae. Es que, verán, nos enteramos ahora de que el exalcalde de Barcelona, Trías, del mismo partido que el delincuente golpista Arturo Mas, pagaba
con fondos públicos, del ayuntamiento de la Ciudad Condal, un sueldo de prácticamente dos mil euros a la actual
alcaldesa de la ciudad, la podemita Ada
Colau, laPescadera. Tal cual.
Era cuando la podemita lideraba la Plataforma
Antidesahucio, más conocida por la PAH.
¡Vaya sorpresón! Así que cuando laPescadera se pegaba contra el Ayuntamiento de
Trías, este desde el ayuntamiento, le pagaba a la reivindicadora un sueldito de
1.973 euros mensuales; así durante todo un año, hasta que se decidió la
pescadera a asaltar, desde la política, el ayuntamiento, lo cual no es de
extrañar, viendo el birria de oponente a la alcaldía. No es todo eso, no.
Maravillas. Desde el ayuntamiento también se le pagaba otro sueldo al que ahora
es “elmanoderecha” de laColau, Cotarello.
El argentino, por cierto, para conseguir la nacionalidad española juró acatar
la Constitución de España, y ahí lo
tiene, independentista como el que más, ultrajando la bandera española desde el
balcón. Seguro que se acuerdan. Pues, ese, tenía también un sueldo del
ayuntamiento sin ser tan siquiera concejal.
Parece,
como publica hoy El Mundo, que todo
eso de los sueldos era por un convenio que firmaron los de la Plataforma y el
Ayuntamiento, con 100.000 euros de subvención por medio, por participar en el Observatorio de los Derechos Económicos
Sociales y Culturales. El caso es que complicaban bien el asunto para que
nadie lo entendiera, y es cierto que no se entiende; sin embargo, la conclusión
no tiene vueltas: sueldo para laPescadera, sueldo para el argentino, otro
sueldo para una tercera persona -podemita, claro- y que el convenio continúa
vigente, con lo cual la sucesora de laPesacadera en la PAH también tiene sueldo
del ayuntamiento.
Y
todos tan felices y comieron perdices, hasta elSieteMesino, elErrejón,
que aunque no tenía que ver con el ayuntamiento de Barcelona -que se sepa- se
embuchaba otros casi dos mil euros de la universidad de Almería, total por hacer nada. Como a los que Trías -otra vez
Trías- pagaba -ojo, con dinero del ayuntamiento- el alquiler del “Banco”, agua
y luz incluidas, y otros menesteres, para quitarse el problema de encima. Eso
es lo que pretende también la pescadera, quitarse de encima el problema
comprando el banco para solaz y disfrute de los okupas. Pero con dinero
público.
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