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jueves, 3 de noviembre de 2016

La tontuna de Pablo Manuel

Espinar sigue sin dimitir, como tampoco
lo han hecho Iglesias, Zapata, Rita, Tania, Echenique y Errejón

Han pasado más de veinticuatro horas desde que nos eneteraron del "caso Espinar" -y vamos para las cuarenta y ocho- y el podemita sigue sin dimitir. Me da que podemos perder toda esperanza. Porque, ya ven, ya ha llovido desde que elSieteMesino se comió la beca de la universidad de Málaga, laRita fue condenada por un tribunal por asaltar la capilla de la Complu, laTania se benefició de posición privilegiada para conseguir un piso de protección oficial para ella, otro para su papá y otro para su hermano -y las subvenciones a este desde el ayto. de RivasvaciaMadrid-  y no digamos del Zapata, o el mismísimo Echenique, el "contratador" de esclavos.

Ya digo, sin esperanza. Menudo plantel. El que esté libre de culpa que lance la primera piedra. Aunque, ojo, no lo diremos muy alto, porque estos son capaces de dilapidar a cualquiera -quizá por la influencia iraní-, con tal de llevar la razón, aunque esta la tengan guardada, como el agua, en un cesto de mimbre.
Por ejemplo, ahí lo tienen a elBarredor Pablo Manuel, el defensor de causas perdidas. Justifica todo lo hecho por su patrocinado elEspinar. Vamos, que hizo bien y, además, lo que hizo lo hizo también  bien. Para que nos entendamos, que el jovenzuelo de entonces  -de ojo avizor-  elEspinar si vio que no podía pagar la vivienda nueva, que no llegó a estrenar, lo lógico es que la vendiera. Pero, fíjense, la podía haber vendido más barata, subraya elBarredor, y no lo hizo porque la Comunidad de Madrid le permitía venderla más cara. O sea, que según elBarredor, lo más ético era venderla como la vendió y sacarse treinta mil euritos. En verdad, no he entendido nada, pero si elBarredor lo dice, palabra de Dios, que como no sea este, a través de Cáritas, el que ayude a los pobres, como estos esperen a los podemitas ya pueden hacerlo "sentaos". Como nosotros, si esperamos que alguno de ellos dimita.
Lo más grave, desde luego, es lo de ElBarredor, el que iba a barrer la casta, hasta que logró formar parte de ella. Cerca de ciento veinte mil euros al año que se embucha el pavo, buena parte de ellos de procedencia iraní, más lo que no sabemos de lo de antes, que bien se lo dijo el portavoz pepero, Hernando, en el Pleno de investidura: cuatro millones de dólares, se supone, de Venezuela. Fue cuando los podemitas hicieron la payasada de salirse de la sala, para volver a entrar. Mucho teatro, pero elBarredor no dio después, tan dado a convocar a los medios, una explicación pública. ¡Jéjé, que no nos hemos olvidado! Aunque, como con lo otro, perdamos toda esperanza.
Anda diciendo por ahí elBarredor que Luis María Ansón le tiene ojeriza y que su artículo del otro día, donde aseguraba que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) tenía información abundante sobre sus vergüenzas no es otra cosa que ganas de liarla, ahora que están en pleno proceso preelectoral interno los podemitas. Pero, coño, siendo así, y siendo el que lo acusa, no vale con dejar entrever que el periodista estaba implicado en lo del 23F, que ni viene a cuento ni aporta prueba alguna, sino que hay que remover Roma con Santiago para que todo quede claro y bien claro. Pero no, miren, no. Está elBarredor más en la liza interna que donde debería estar. De aquí, a otra depresión. 

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