Referéndum o referéndum

Venga o venga. Porque es que no nos enteramos, los de aquí, más para el oeste. Después de la cumbre cataloindependentista secesionista, la verdad, todavía no lo tenemos muy claro. No sabemos si a elPuigidemçon se le han caído los palos del sombrajo o es que la poemita laColau tiene una fuerza grande, gorda, más que la que los propios promotores del evento del referéndum le atribuían. Parece que el hijo del pastelero se ha desinflado con las fiestas navideñas y que esto le está sentando fatal a los republicanos.

De las pocas cosas sensatas que se le han podido escuchar a Ana Gabriel, si, la de los guarrillos de las CUP, es que el "proceso" secesionista arrojó a Arturo Mas a la papelera de la Historia, tanto como ella arrojó los "tanzanitos" que se sacó de la sobaquera, no sin olerlos antes. Eso, que algo semejante le está empezando a suceder a elPuigidemón, que ha cedido ante la musculatura, política evidentemente, de la podemita alcaldesa de Barcelona. ¡Quién nos lo iba a decir, quién se lo podía suponer que laColau fuera la que paralizara todo el "proceso"!

Sí, sí, que ante lo planteado por la cumbre independentista estaba de acuerdo laColau, prácticamente en todo, y, básicamente, en el derecho a decidir; aunque, con un pequeño matiz, digamos que con un pero: la fecha de celebración del referéndum o, matizando, que la consulta ha de hacerse pactándola con el Gobierno central y no de manera unilateral, porque sería ilegal. ¡Mecachis! Ahora se le ocurre esto a esta, cuando estamos prácticamente a nueve mese de la gran parida. Y lo más sorprendente, o no, es que el hijo del pastelero lo acepte, como si fuera algo natural. Es como si se le hubiera ocurrido a él, pero que no había encontrado ni el día ni la hora para exteriorizarlo. Tuvo que llegar laColau para salvarle el trasero, porque el "asssucar" festero independentista se le agotaba en la pastelería al su papá.

El que no ve con buenos ojos, pero nada bien, el acuerdo logrado en la cumbre independentista es el republicano Junqueras -socio de Gobierno con los convergentes-, que está más por la labor de un referéndum o referéndum en las fechas anunciadas y prometidas, es decir para la segunda quincena de septiembre del año que viene. ¡Coño, es que así se lo habían dicho a los suyos y los del Parlamento catalán ya tenían conocimiento y estaban de acuerdo con ello! En realidad, los republicanos son más congruentes, aunque estén equivocados. Y no para todo ahí, que es que elRufián ese está dispuesto, incluso, a que la consulta se adelante si se produce, como temen, una inhabilitación masiva de cargos públicos. Ya saben Mas, Forcadell, Homs y unos cuantos más. De todas formas, y en este caso en particular, hay que ser indulgentes con el jovencito, porque es Navidad y los efluvios espirituosos -y los que no lo son tanto, en blanco, como los del anuncio- se le amotinen en la sesera.

Pero, ahora que han llegado a ese acuerdo los independentistas y visto el asunto desde otro punto de vista, lo cierto es que, acaso, no nos importe la celebración de un referéndum, eso sí en el que participemos todos. Podría suceder que se llevaran una sorpresa y la mayoría de los españoles accediera y apoyara la independencia de Cataluña. Entonces ya no podrían las empresas catalanas etiquetar sus productos con "envasado" o "producido" en España. Lo tendríamos más claro. Daría gusto verlo, y fuera de pamplinas. Esta cumbre de ayer ha dejado al descubierto muchas de las miserias de los de "España nos roba".