Los palos del sombrajo de los golpistas

No puso bien el ojo el republicano Oriol Junqueras cuando apuntó al juez Santiago Vidal como uno de sus grandes valedores. Lo quitaron los españoles de juez y él lo hizo senador en recompensa por los trabajos prestados, por ser el redactor de la Constitución de lo que pretenden los secesionistas sea la República catalana. El exjuez ha hecho más daño a lo que los golpistas denominan el proceso que todos los parones que al mismo ha venido dando el Tribunal Constitucional. Muchos catalanes que no se consideran españoles hoy se han dado cuenta de con quién se la están jugando.

De hecho, y de entre todos los golpes de Estado de los secesionistas catalanes, este es el verdadero Golpe . Es como lo de "uiquilis", pero a la catalana, donde no se salvan de estar espiados ni los perroflautas de allí, que algunos ingresan de olé, pero sin declarar a Hacienda. Ahora que acongoja el hecho de que el hijo del pastelero no sólo conozca los datos tributarios de los catalanes, porque coño, lógicamente, si tiene acceso tan fácil a ellos, yo no me cortaría ni un pelo, me haría con todos los de todos los ciudadanos de España. El precio no importa, si hay dineros para promocionarse en el extranjero, no lo duden, haylo también para esto, que es todavía más rentable. Nos pueden coger a todos por los cataplines, estrujar y no soltar hasta que silbemos. Si es deleito o no, lo mismo da uno más. ¡No pasa nada!

A ver ahora qué hacen los más de ochocientos magistrados que habitan fronteras adentro de la catalonia. La Generalidad sólo quiere quedarse con unos trescientos, pero de los escogidos, de los que demuestren de manera fehaciente que están con el proceso. Los otros quinientos que vayan preparando el hatillo y, como los refugiados sirios, que vayan pidiendo asilo político en España, la España que roba a los catalanes. De momento, lugar de acogida pueden tener cerca de la frontera, pero de la parte de acá. A medida que se vayan marchando los infantes de la Academia Militar de Zaragoza, los magistrados podrán ir ocupando dependencias, que con gusto se las cederá el alcalde podemita. Sólo, se le supone, que les exigirá que hagan Justicia, pero sin juzgar a nadie, igual que quiere que los militares sean antimilitaristas. O algo así por el estilo. Aunque bien mirado, si se nos arriman quinientos jueces más, no hay mal que por bien no venga, podrían colaborar con los jueces españoles a agilizar la Justicia de la nuestra parte.

Ya pueden comer pasteles elPuijidemón y su vice Junqueras, que hoy les ha "agriao" el día el exjuez y ya exsenador Santiago Vidal. Pero, claro, es que Junqueras no lo vio. Pero es que quien traiciona una vez lo puede hacer cien veces. Vidal traicionó a España -pero sólo en sus ratos de asueto- y llevaba meses traicionando a los de la Generalidad. Sí él iba diciendo estas cosas por ahí, para quien quisiera escucharlo. Que puede que sea tonto, pero no bobo. O acaso las dos cosas a la vez. Y lo escuchaban y se reían de regocijo sus oyentes, porque todo estaba en marcha, todo estaba atado y bien atado, hasta los servicios secretos de la Generalidad -entrenados en otros países, jope- que oían lo que decía pero que no entendían de nada y eran funcionarios de España, digo los espías.

Y el Gobierno de España, ignorante, tampoco se enteraba de nada. Y la vice de España se abrió allí un despacho, y eso. Fue para hablar. Llevó la mano tendida del presidente. Pero, nadie quería dialogar. Así que se puso a escuchar.