Era lo que nos falataba por saber, que los podemitas tienen entre sus filas una "madre coraje". ¡Mecachis"! Y nosotros sin saberlo. Tan es así que entre ellos la conocen como laEspartana, ejemplo que hasta el propio Pablo Manuel pone como el de la mujer trabajadora. No la suben a los altares no siendo que le entre la "neura" a la "portavoza" de laSeñáManuela, la alcaldesa no, la del torso desnudo, la musa de Luis María Ansón, Tanía Sánchez, no, la otra, Rita Maestre, lasaltaCapillas y la mande al paredón, como a los del 36, con permiso y perdón, por supuesto, de monseñor Osoro, el de la diócesis de Madrid.
Aunque, miren, parece que no está el horno para bollos en el partido; si hay que hacerlos, se le encargan al papá de elPuigidemón, que, por si alguien no lo sabe, es pastelero, de ahí que el presidente de la comunidad autónoma del noreste sea casi más bien conocido en todos sus méritos, como el hijo del pastelero, aparte de como delincuente golpista, que, además, nos roba el dinero a todos los españoles. ¡Olé!
Pero, bueno, a lo que nos concierne, con laEspartana, cuyo nombre recordamos es Gema Gil, por eso de ir conociéndonos. Pues laGil -y paro ahí- va en el puesto número cincuenta y ocho de la lista de elBarredor a VistalegreDos. Ella misma, laGil -y vuelvo a para ahí- se define como "madre, compañera de trabajadores de Coca-Cola en lucha". Si de algo sabe es de "luchar por los derechos laborales". Y su meta última, que persigue con ahínco, sin desfallecimiento, es "seguir defendiendo el trabajo, ayudando a los trabajadores". ¡Olé, otra vez, coño!
Cuando uno lee o escucha esos principios no se puede evitar que unas pequeñas lágrimas resbalen por nuestras mejillas; vamos, que no somos de piedra, y la emoción nos invade. No es para menos. Porque, además del apoyo activo a los "compis" de Coca-Cola en lucha, Gema no se ha perdido ni un mitin ni acto público en el que estuviera presente el que parece ser su ídolo, Pablo Manuel. A eso se le llama admiración y, como dicen los "boisescaus", lealtad, abnegación y pureza. ¡Por tercera vez, olé, o si lo prefieren: torera, torera!
La contrariedad, ya ven, que es que se nos han caído los palos del sombrajo cuando algún maledicente nos ha enterado de que laGil se encontraba de baja por depresión (parece que de ansiedad). Sólo lleva disfrutando de la baja con mítines y manifestaciones desde mediados de 2015 hasta la actualidad. Algo parecido a lo de no voy a misa porque estoy cojo, pero a la cantina poco a poco. Me imagino la maldita gracia que le hará a los de la su empresa, una aseguradora potente, el verla en esas "fiestuquis" del partido, que claro, constituirán para la "madre coraje" una verdadera terapia a su enfermedad. Aunque no deja de ser una inversión de futuro, porque si elBarredor ha llegado a donde ha llegado, también ella puede llegar a no se sabe dónde, a lo peor a negociar un Gobierno de coalición con elPedroQué. LaEspartana y elPedroQué unidos porque sí. ¡Madre mía, menuda pesadilla; a veces, la realidad supera la ficción. ¡Menudo cartel!
Ya ven el funcionario de Valencia, que ha estado diez años sin trabajar metiéndose para la saca más de cincuenta mil euros al año. Ahora ya se entiende, al chiringuito de citas gais que regentaba acudía mucha gente, a la que ahora tiene cogida por los huevecillos. A ver quién era el guapo que lo denunciaba. Una vez más, la realidad suprando la ficción. Esto es así, y ya no digo más olés, que me denuncian los animalistas. Ala.
Ya ven el funcionario de Valencia, que ha estado diez años sin trabajar metiéndose para la saca más de cincuenta mil euros al año. Ahora ya se entiende, al chiringuito de citas gais que regentaba acudía mucha gente, a la que ahora tiene cogida por los huevecillos. A ver quién era el guapo que lo denunciaba. Una vez más, la realidad suprando la ficción. Esto es así, y ya no digo más olés, que me denuncian los animalistas. Ala.
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