Venezuela se muere

Pero vamos, que vamos, que comience ya laSeñáManuela a aplicar su plan de Derechos Humanos. Si se ha gastado en ello más de dieciséis millones de euros, que no los deje apolillar. "Velái" tiene, sin ir más lejos, a los catalanes, a quienes los catalufos les están haciendo la vida imposible, pero si no quiere -que es que no quiere- también tenemos a los opositores venezolanos al régimen de elGorilaDos, NicoMaduro, gran amigo y financiador de Pablo Manuel y su ínclito Monedero, la rata del Metro, pongamos que hablamos de Madrid. No tiene cataplines laSeñáManuela; es evidente que no.

No estaba, no, elBarredor Pablo Manuel entre la concurrencia al acto, en el que los expresidentes del Gobierno de España Felipe González -de laPesoé- y José María Aznar -de laPepé-, juntos y unidos, en contraposición a los de la Izquierda Unida y los podemitas, clamaban por la democracia en el país de los amigos venezolanos y por la puesta en libertad de los líderes opositores, cuando se cumplen tres años del encarcelamiento -así porque sí, sin más- de Leopoldo López, el líder más carismático de la oposición en Venezuela.

Bien saben los dos, Felipe y JoséMari, cómo se las gasta el régimen de Nico. El sucesor de elGorilaUno, por quien doblan la cervid Pablo Manuel y elMonedero -a éste último, además, le corrían las lágrimas por las sus mejillas cuando el dictador se marchó de este mundo, no se sabe a dónde- cada día que pasa tiene peor atendida su hacienda, que es su país, y más acojonados a sus habitantes. Nico se está cargando Venezuela, la está matando, con miles y miles de desaparecidos y de asesinados, y otros tantos miles, centenares, de muertos de hambre, a los que ni tan siquiera se les da la oportunidad de "panpedir", aunque sea a otros, tan sólo algo menos miserables que ellos.

Tampoco estaba en el acto de Madrid José Luis Rodríguez Zapatero, expresdiente también -y para nuestra desgracia- del Gobierno de España, durante casi ocho años, de los más oscuros de nuestra Historia. ElCetapé no fue invitado. ElCetapé ya ha estado hurgando en Venezuela. Quería poner paz y orden, pero, al contrario que el rey Midas, todo lo que toca se convierte en mierda. Así enmarranó nuestro país, nos lo quedó hecho unos zorros, "destrozao", con una Cataluña dividida, donde los catalufos, a los que benefició descaradamente, amargan la vida a los verdaderos catalanes. Si es que ni la oposición venezolana lo quiere. Si es que desde que metió allí el cuezo les va de mal en peor a los demócratas. Si es que Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López, se santigua cada vez que elCetapé llega a Venezuela, porque, de mal en peor, va en declive la situación de su marido, más allá de las rejas que lo separan de la libertad.

¡Allí iba a estar, en el acto, el podemita Pablo Manuel! ¡Y un huevo! Pero sí le faltó tiempo para acusar a los expresidentes españoles -González y Aznar- de echar más leña al fuego. Ya se necesita tener cara, y muy dura. Tampoco otra cosa se puede esperar de quien es beneficiado por el régimen venezolano, de quien recibe fondos de Irán y que mira de reojo a los rusos, por lo que pueda caer ¡Ojo, que no vengan! Poco se puede esperar de quien se niega a formar parte de un Pacto de Estado Antiyihadista, pero que defiende a los etarras y desprecia a los asesinados y a sus familiares -víctimas del terrorismo- y, por si fuera poco, apoya la celebración de un referéndum que proponen los catalufos. Ahora va y lo casca. Que mucho pelo, mucho pelo, que así le luce al pavo. Sólo es cuestión de tiempo. Lo de la calva, digo.