El circo Price

Todavía no sabemos si el catalufo, y chulo, Homs ha intentado entrar en la Cámara Baja, aunque para el caso da igual. Un año y poco más de inhabilitación, que, como al otro golpista Arturo Mas, se le pasará en un soplo. Les sale barato a los catalufos desobedecer al Constitucional: si hace falta, se pone a otros y que sigan dando carrete, que ellos continuarán haciendo de su capa un sayo, ante el desasosiego del personal, que terminará en pasotismo total, no porque hagan lo que hacen, sino porque se lo dejan hacer, los que hace tiempo tenían que haberles cortado de raíz. Que es que manda bemoles. Eso.

Sucede lo mismo en el Congreso de los Diputados, con los podemitas. Dicen que estos están encantados con la presidenta de la Cámara, la pepera Ana Pastor, la anterior ministra de Fomento, la que le puso el Alvia a los gallegos para acercarlos más pronto a Madrid; los puntos intermedios, usted perdone, verdaderos apeaderos, como el de la capital Zamora, que además es su provincia.

Pero, bueno, en fin. Los podemitas encantados con ella. Les deja hacer lo que les viene en gana, así que no es de extrañar. Después de tanta chorrada que llevan encima -y lo que te rondaré, morena-, y las expresiones del podemita en jefe, Pablo Manuel, de mal gusto y chabacanas, como no podría ser de otra manera -como decíamos ayer, ni buen mozo, ni bien "ablao"- anda pululando por el Congreso, a modo de matón -tampoco podía ser de otra manera- un sindicalista agrario y medrador, que se dedica a provocar al personal. Se trata de elCañamero, que se pasea por el Hemiciclo con las fotos de elBódalo y de elUrdangarín, exigiendo al ministro de las Justicias, que o saca al uno de la cárcel o mete al otro. Piénsase este agricultor -que no sabe ni entiende de letras-, que anda todavía con la yunta, aunque, eso sí, campando a sus anchas, con la permisividad de la presidenta, Ana Pastor. Esa institución nuestra es algo muy serio.

También el anterior presidente de la Cámara, y pepero, Jesús Posadas, se mostró permisivo, hasta el punto de pasar del proetarra que rompió en el estrado del Parlamento un ejemplar de la Constitución. Se marchó el batasuno de rositas. Y como son muy "buenistas" estos de laPepé -sobre todo con los que no son de su partido- estas cosas no tienen importancia, sólo son anécdotas. O bromas de compadreo, que sólo sientan mal a los que no estamos allí, claro, pero que sabemos de la existencia de un Reglamento y que, lo más curioso, está para que se aplique.

Como sigamos así, y si es que la Legislatura se alarga, el Hemiciclo va a terminar pareciendo la pista del circo Price, oigan, con derecho de entrada para los amigos de los podemitas, que sesión si y otra también llenan las gradas de los invitados. Y hasta se permiten gestos y gritos de aprobación y repulsa. O de los que tienen mucho que perder, como los sufridos estibadores, que quieren jubilarse a los cincuenta -casi veinte años antes que los demás- con el ochenta por ciento del sueldo; así, cualquiera, que cobran más de ciento ochenta mil al año, y sin necesidad de estudios.

Y los "gastazapatos" seguimos pagando a la Unión una multa diaria de más de ciento cuarenta mil euros, por lo de la estiba. Y Magdalena Álvarez, Malena, la lumbreras que fuera ministra con elCetapé, nos dejó un pufo de mil quinientos millones con las autopistas; una indemnización que nos toca pagar a todos, por la incapacidad de esa señora. Y la pasta que nos deben los catalufos -miles de millones- y la pasta que les va a dar el Gobierno de España, miles de millones. Y los dinerales que se nos llevan los vascos con el "cupo". Y muchos etcétera y puntos suspensivos. Y, para más desasosiego, el atentado de Londres -que nos puede pasar a cualquiera- con una nueva versión: ya no les hace falta un camión a estos descerebrados asesinos: un coche y una depilación para entrar limpio en el cielo. Y Pablo Manuel y los suyos sin apoyar el Pacto de Estado Antiyihadista. pero bien que arropan a los etarras y a los familiares de estos. Menuda entrada de primavera; todo al revés, chico.