Vaya, hombre, ya
era hora, aunque más vale tarde que nunca. Parece que la fiscalía se ha dado
por aludida y va a investigar los casos –que son muchos- en los que los niños
han sido manipulados en manifestaciones organizadas por los golpistas. Y ahora
sólo faltaba que nos mezclaran a los niños con los delincuentes de Arrán y los etarras de la “calleborroca”, que ya se han conjurado
para trasladarse a la región catalana, con el fin de liarla el día del
referéndum ilegal del UnoaCero.
De hecho, la banda
terrorista, uno de los grandes aliados y de mejor calidad –hasta ahí han
llegado- de los golpistas, están apoyando sin condiciones la celebración del
referéndum, que ya plantean como un proceso similar, ejemplo a seguir, para las
provincias vascuences y Navarra, de
la que pretenden su anexión. Así que con estos delincuentes de la mano, acaso
los golpistas vayan a mezclarlos con los niños. Imaginen, niños y proetarras y
delincuentes de Arrán –los de las CUP-
juntos, a los que se quieren sumar los bomberos de Barcelona, dependientes del ayuntamiento de laPescadera. También se podrían añadir los mocetes de laInvencible, pertenecientes a un
sindicato de este cuerpo policial, que predica ya la insumisión, una postura
–huielga- pasiva ante los colegios electorales. Todo un cóctel molotov, de los
de los rusos.
Desde que pedimos
una investigación por lo de los escolares, es la hora, ahora, en que los
inspectores piden que la fiscalía de menores “investigue actos por 1-O
con menores en horario escolar”. Lo dicho, que así sea, aunque sea tarde.
Oigan, miren, que
aquí puede haber gato encerrado, todo ello liderado por los de la ANC y Ómnium, las asociaciones de losJorges.
Todo un paquete en uno: Jorge y Jorge, sindicalista de comisiones de
los bomberos y el sindicalista de una parte de los de laInvencible, todos ellos
a prisión preventiva; los etrras y los cuperos irán cayendo a medida que la
vayan armando. Y, los niños, por supuesto, a sus casas.
Como decía el
expresidente de Gobierno, el
socialista Felipe González, a muchos
nos da que ya se tenía que haber aplicado el 155. Resulta más que evidente que
lo que están haciendo los golpistas es permanecer en el tiempo, es decir que el
tiempo corra, y que corra a su favor. O lo que es lo mismo, distrayendo al
Gobierno.
Ese mismo guion,
digan lo que digan los demás, está siguiendo el Mayor Trapero, el jefe
de los mocetes, que un día si va la reunión con el fiscal, otro no asiste a la
planteada por el coronel de la Guardia
Civil del mando único, otro dice que las órdenes del fiscal son muy
difíciles de cumplir y que van a provocar altercados. Para más coña, elPuigidemón –el hijo del pastelero- ha
convocado reunión de la Junta de
Seguridad, a la que sí va a asistir el Gobierno. Que la sangre no llegue al
río.
Y van pasando las
horas y los días. Y los que no estamos allí, en la pomada, nos angustiamos,
porque parece que todo sigue igual o peor. Nadie informa, nadie da
explicaciones desde el Gobierno de elPresiRajoy.
Cierto que no por mucho madrugar amanece más temprano, pero leche, como va a
amanecer igual, que apliquen ya el dicho articulito.
Fuera de allí, en Madrid, los podemitas del ayuntamiento
de laSeñáCarmena, con ella al
frente, han votado en contra de una moción en apoyo de los alcaldes de allí,
que están siendo amenazados y coaccionados por los golpistas. La moción se
apoyó por los de laPesoé, laPepé y los Cíus, con el interrogante de por qué los pesoístas no echan del
gobierno del ayuntamiento a los podemitas, y de otros ayuntamientos y de
algunas comunidades. ElPedroQué ya
nos lo contará algún día.
Sin embargo, los
de la Iglesia, de perfil, como casi
siempre, una de cal y otra de arena. Mientras apelan al diálogo generoso y
honesto en el “respeto a los cauces de la Constitución”,
parece que ha hechos suyos “los deseos y sentimientos manifestados recientemente
de forma conjunta por los obispos con sede en territorio” catalán. Lo que
decían conjuntamente los obispos catalanes era abogar por la independencia,
dejando de lado, desamparando a más de la mitad de los catalanes. La Iglesia
muestra así su perfil por el problema, poniéndose de perfil, pero con más
inclinación hacia allá. La sombra del abad de Monserrá es alargada; total, el presidente de la Episcopal es de Valladolid. Aunque el asunto dará mucho que hablar.
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