Traductor

Buscar en este blog

jueves, 19 de abril de 2018

Rajoy, Montoro, Zoido, Dastis, ¡Quo vadis!

Están buenos y buenas ¡Jejé!- estos de laPapé. Parece que no dan pie con bolo y lo único que se les ocurre es hacer el ridi, que les va a costar un güito superar. Todo ello, y principalmente, por no tener voluntad de acabar con el separatismo y, en particular, con la cabeza golpista. Son muchas las idioteces que sobre el asunto está cometiendo laPepé. En este sentido no se salva ni el mismísimo PresiRajoy, que, como buen gallego, siempre había logrado quedarse por detrás de la escena principal, como en bambalinas, vamos.
Resultó muy duro para los españoles escuchar las palabras de elPresiRajoy desde Argentina, calificando de totalmente correcto el comportamiento del Gobierno de Ángela Merquel, tras la puesta en libertad del golpista elYordi elPuchi. Y no es eso, hombre, que ya el hecho en sí de liberarlo fue muy grave, incumpliendo la euro orden, pero el desprecio con el que habló de España y de los españoles la ministra de Justicia alemana no puede quedar así, ni antes ni ahora. No tiene perdón de Dios. ElPresiRajoy dio por buenos los insultos de esta ministra, que, poco menos venía a mostrar, como los golpistas, su odio hacia nuestro país, como en su día lo desataron los nazis contra los judíos.
Es más la ministra nazi llegó a asegurar que le iba a costar mucho a España demostrar que los golpistas hubieran cometido el delito de malversación. Daba por hecho que elPuchi podría vivir en Alemania como un ciudadano libre en un país libre, en Alemania. Y, casualidades de la vida, viene el ministro Montoro, el de los dineros españoles, a decirnos que en, efecto, tiene razón la nazi, que los golpistas no se gastaron ni un sólo euro público en el referéndum del UnoaCero. Ya digo, coincidencia, que se adelantara la alemana a aventurar esa aseveración sin ver tan siquiera el resultado de las investigaciones judiciales.
Pero, por si Montoro no quería caldo, el juez Llarena ya le ha dado dos tazas, elevando el desfalco de dinero público por parte de los golpistas a dos millones de euros. Por supuesto, seguimos esperando la información del ministro, que le ha requerido el juez Llarena. Me da a mí que lo tiene crudo Montoro, que se ha enfrentado al poder judicial, como si le tuviera ganas o inquina. Se ha jugado mucho en el envite. Si no demuestra lo que dijo, moralmente está obligado a marcharse, por inútil y socialmente, ha de pedir perdón por alinearse al lado de los golpistas y facilitarles, con sus mentiras, el intento de descrédito de la Justicia española.
Aquí, en el sentido de repartir culpabilidades, hay para muchos. Ahora el ministro de los Interiores, Zoido -¡otra vez Zoido!-, se lo monta a su manera, como si estuviera todavía "mareao" de su viaje vacacional gratuito en el Juan Sebastián Elcano. Sólo a él se le ocurre nombrar, respectivamente, al jefe de la escuela de bomberos y al jefe de los policías autonómicos y municipales, dos personas declaradas independentistas. No hay nadie más en el mundo. Si es que se las están poniendo desde el Gobierno de Rajoy a los independentistas como se las ponían a Felipe II.
Porque, otra, y va la tercera, al ministro de los Exteriores, un tal Dastis, se las cuelan desde todas partes: los belgas, los alemanes, los finlandeses y hasta Maduro. Es el ministro ese que dijo que la ministra alemana de Justicia no había estado acertada en sus declaraciones. ¡Jo, no vean, la alemana se escondía tras las palabras de Dastis, pero para que no la vieran carcajearse! Bueno, pues ahora resulta que se le ha colado en la "embajada catalana" en Bruselas el exconsejero de Cultura de la Generalidad, y se ha marcado una conferencia. Un "incidente desagradable", esa ha sido la calificación de Dastis. Medidas contra el personal que se lo permitió, "ya se tomarán". Este hombre confunde la diplomacia con cualquier cosa, como el que confunde la velocidad con el tocino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar con respeto