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jueves, 14 de junio de 2018

Con el agua al cuello


No le h hecho falta al maestro de periodistas deportivos José María García, también conocido en sus tiempos por “El butanito”, tener facebuk para dejar de ser amigo de Julián Lopetegui. Para García lo que han hecho éste y el otro, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, no tiene nombre. Lo ha decepcionado tanto el exseleccionador, tanto, tanto que “ha dejado de ser mi amigo” y el ya su examigo es un “indeseable y un traidor” y lo que ha sucedido en la Selección ha sido una “puñalada trapera, deslealtad y canibalismo”. Pero de todo esto hay un culpable, que no es otro que el presi del Real Madrid.


Para García, Florentino Pérez es el gran responsable, sin duda, por su “soberbia y poder”. Hasta tal punto está enfadado e indignado el viejo periodista que está seguro de que ningún “madridista bien nacido” entiende lo que ha hecho el Real Madrid, que ha “descojonao” la Selección. En efecto, todo ha sucedido en pocos minutos, cuando apenas faltaban cuarenta y ocho horas para que España debute en el Mundial, frente a Portugal. Son las cosas del dinero y del poder en el deporte rey.

No hay más. Bueno sí, hay un presidente de la Federación, Rubiales, que ha enseñado los colmillos y que, en vísperas del evento mundial, ha tenido la valentía de destituir al traidor Lopetegui. Pero, con un par, oigan, que era una decisión muy difícil y muy arriesgada. Despidió a Lopetegui y contrató a Hierro, un entrenador con apenas experiencia en el Oviedo, pero que seguro que se batirá el cobre, como es obligación de todos los integrantes de la Selección.

Fútbol aparte, el que tendrá que volver a batirse con los peperos es el nuevo presidente del Gobierno de España, elPresiSánchez, a quien los de Rajoy le piden que dimita, al haber tenido conocimiento de que uno de sus ministros –otro- está imputado por haber permitido robo de agua del Parque de Doñana, parece que cuando el actual ministro de Agricultura, Luis Planas, podía tener responsabilidades y mando sobre ello.

Lo cierto es que el ministro está imputado, aunque parece que va a ser “desimputado”. Pero los peperos se apoyan para su petición en que elPresiSánchez largó hace tiempo que si llegaba a presidente del Gobierno no abriría “despachos ministeriales a imputados”. Y es que el ministro de Agricultura lo está desde 2016, o sea que no es de ayer. Pero, más bien se callaban los peperos, porque le piden la dimisión con tan poco convencimiento que encargan que lo haga público un diputado de tercera fila. Sólo ponen ahínco y ganas en sus guerras intestinas. Un asquito. Ahora se suma a la pendencia el exministro de Exteriores García Margallo. Otro asquito.

También hasta el cuello le llega el agua al impresentable elPuchi, por su gestión del agua cuando fue alcalde del ayuntamiento de Gerona. La causa está bajo secreto sumarial, pero ya tuvo que entrar la Guardia Civil en el ayuntamiento para hacerse con documentación. Es que cree el juez que la institución presidida por elPuchi desvió a través de los contratos de agua más de once millones de euros mediante el cobro de servicios inexistentes y facturas hinchadas. Si algún día regresa y lo imputan dirá, como todos, que esa es agua pasada y que la dejen correr, que esa ya no mueve molinos.




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