Traductor

Buscar en este blog

sábado, 30 de junio de 2018

El monseñor independentista

Ya se le extrañaba, ya, que no estuviera en el "fregao". El monseñor catalán -aunque en realidad es aragonés- Omella, hombre, que parece como que anduviera por ahí "agazapao", ha vuelto a la vida, presumiendo, enseñando pecho. A quedar a bien con todos, como elPresiSánchez, que equipara al hombre de cromañón catalán con el embajador y defensor de España  ante la comunidad internacional en los Estados Unidos, Morenés. Lo del nazi, todo lo contrario, se dedicó a mentir sobre la democracia española y sobre el pueblo español.
Es "mu" valiente el xenófobo y cortito de mente catalán, acompañado por un séquito de cien personas; como un "maarajá", vamos. Así cualquiera, aunque obvia y oculta que luego no lo dejaban entrar en el reciento, por follonero.
Pues, eso, que con la llegada de laPesoé al poder a monseñor Omella le ha llegado como la primavera, y comienza a florecer. Para que nos enteremos todos -los de las tres culturas, y si quiere alguno más también-, él estuvo mediando, afirma, entre Rajoy y el señor elPuchi. Lo de señor es cosa del cura-, lo de Rajoy es del poder terrenal. Medió el sacerdote, él solito, sin necesidad de los consejos del abad de Monserrá, y lo hizo antes del UnoaCero y antes de la declaración de independencia por parte de los golpistas.
Poco influencia tuvo el amigo Omella, porque, ya ven, pasó lo que pasó, y él se vio obligado a retirarse a la reflexión -por un por si acaso- y al ayuno, más de cuarenta días y quinientas noches. Con la llegada de elPedroQué? y el próximo traslado de los golpistas a prisiones de Cataluña se le ha alegrado el hábito al monseñor; acaso también se le alegre con el correspondiente trasiego que se avecina de los presos asesinos etarras. ¡Por qué no! Dios perdona a los delincuentes, aunque se cisque en los delitos. O no, o eso es lo que estudian y repiten hasta la saciedad los aprendices a futuros letrado; aunque, bien le puede servir de paradigma a monseñor.
Hasta ahora parecía mudo el cura, como el hermano de los parientes de los Marx. Pero, ya digo, ahora le ha dado por salir del escondrijo para presumir y expresar su dolor -¡qué dolor, qué dolor!- por el encarcelamiento de los golpistas. Le parece una prisión provisional "excesiva", muy larga, que a él le sugiere muchos interrogantes, pero que no tiene güitos para expresarlos.
Vamos que lo suyo hubiera sido -como va a ser en breves- que estuvieran los golpistas en prisiones catalanas, o mejor, dice el cura, en sus respectivas "casas esperando el juicio", pero no el juicio final, que para eso ya está él como acólito del Señor y del señor elPuchi. Ya le vale al cura, y eso que no es el de Monserrá. Habría quedado mejor con ellos si se hubiera inclinado por el indulto, antes, incluso, de ser juzgados, como pedía el fraile elBailón y haberlos considerado "presos políticos" ¡Con el clero hemos "topao".

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar con respeto