El pufo de la cortina de humo.

Tenía que llegar, y llegó el día en el que elPedroQué? echaría mano de Franco, para su salvación, no la del dictador, sino para la del mismísimo presidente del Gobierno de España ¡Quién se lo iba a decir a él! A Sánchez, me refiero. La cortina de humo, del "eseoese" la ha estado reservando durante todo el verano, apurándola al máximo, hasta que ya no ha podido aguantarla más. Son muchas las cosas que están pasando, y muy graves. Se le amontonan. Ya hubiera querido él, a elSánchez me refiero, llegar a septiembre con esta "bala" en la recámara.

Bien pensado estaba, o lo tenía, elPresiSánchez, lo de aplicar decretazo para desenterrar a Franco, sacarlo, como fuera, vamos, del Valle de los Caídos. La familia no quiere que lo trasladen a no se sabe dónde todavía, y de ahí la Ley que se va a sacar de la manga el Gobierno, con el fin de evitar litigios. Así que, a por él, a la brava, y a descansar a otra parte. Pero, está por ver, porque la familia va a buscar las vueltas, para que el desentierro no se produzca.

Ni lo uno ni lo otro preocupa lo más mínimo a una mayoría  del personal. Si exhuman el cadáver del dictador, allá la familia, que lo "reentierren" donde les plazca, o donde los dejen. Que ya ni se sabe. Si al final lo dejan donde está, allá los que quieren que no esté ahí, sobre todo el podemita Pablo Iglesias. No es que para el podemita sea una cuestión de principios ni de ideología, no.

A elPabloManué lo que le preocupa es que desde Galapagar, desde su finca de seiscientos mil euros, ve la cruz del Valle de los Caídos y eso le recuerda, ineludiblemente, que "por bajo" están los huesos de Franco. Aunque otra solución es hacer desparecer la cruz del Valle; así, ojos que no ven corazón que no siente. También cabe el recurso de exhumar el cadáver y hacer desaparecer también la Cruz. Dos pájaros de un tiro. Quedaría un valle para usos varios de los que ya se encargaría el podemita, sobre todo pensando en su gente, que no tiene una finquita como la suya.

En fin, que Sánchez ya ha venido a anunciar que el viernes no nos coja de sorpresa el decretazo. Es la típica manera de anunciar un acontecimiento, es la tópica propaganda de laPesoé. Mientras, pretende elSánchez que la ciudadanía, la plebe, se entretenga sicutiendo sobre la conveniencia o no de la exhumación, de si la decisión del decretazo es o no la más acertada. Comienza así el incendio del que no veremos ni las llamas, a causa de la cortina de humo. 

No cuenta elPedroQué? con que el personal ya no se deja engañar, y que no es tonto, que sabe lo que quiere. Tampoco se olvida de lo que realmente es preocupante: el paro, los impuestos que se nos vienen encima, el terrorismo, la situación de grave crisis en Cataluña. Y que, además, nos quiera chulear elSánchez declarando secreto de Estado su viaje en avión oficial a Castellón, que fue calificado en su día por la ministra mentirosa Carmen Calvo como "agenda cultural nocturna". La señora ministra, a la que La Moncloa ha dejado en ridículo en varias ocasiones, sigue sin dimitir. ¡Que es que mintió!

Y la más gorda, su mujer, Begoñita. No es que esté obesa, sino que menudo "gazapón" nos quiere colar elSánchez con su contratación por parte del Instituto de Empresa. Ya pasará el verano. Y veremos.