Traductor

Buscar en este blog

viernes, 17 de agosto de 2018

El "punto ciego"

Ya la volvió a pifiar elPresiSánchez. No hay dos sin tres o sin cuatro. Como se cree muy listo y muy inteligente, no se le ocurrió otra cosa escribir en su cuenta de tuiter un recordatorio para las víctimas del atentado del 17A, que se conmemoraba en Barcelona. Primero, se dirigió a ellos en Español, como es lo normal, que para eso es el idioma oficial de España; y, luego, lo hizo en Catalán, lo cual no tiene mucho sentido, porque muchas de las víctimas ni saben, ni entienden ni les importa un pito el Catalán. Pero, no es eso lo incongruente.
La aberración estuvo en que en el "tuite" escrito en Español figuraban la bandera y el escudo españoles, mientras que en el escrito en Catalán ambos habían desaparecido, el escudo español y la bandera española. Éste, elSánchez se pensó que estamos tontos y que nadie se daría de la cuenta. Pues se equivocó de tomo y lomo. Se conoce que alguien, algún allegado, le llamó la atención, hombre, que eso no se hace, que eso no se dice, y se vio obligado a rectificar antes de que pasara media hora. Si al menos en el segundo escrito hubiera colocado la bandera catalana, la constitucional, y el escudo catalán, habría contentado, en parte, a los catalanes separatistas y golpistas.
Y este era el que se arropaba en la bandera mural de España, no hace ni tres años, acompañado de la mujer de rojo. Así, ni satisfizo a los que nos consideramos españoles, por cobarde y faltón, ni dio gusto a los separatistas, por omisión. Se lució elPedroQué? Si a esto le sumamos lo del viajecito en avión a Castellón, por lo que todavía no ha pedido perdón -ni lo va a pedir- y la colocación de su esposa Begoña en el Insituto de Empresa, el presidente está conformando la cuadratura del círculo.
Pero otro fallo garrafal cometió en esta jornada de duelo elPresiSánchez, tal cual fue permitir que se colocara una pancarta -asquerosa, por su contenido- contra la visita del Rey de España a Cataluña. Esa pancarta, de dimensiones enormes, colocada en un edificio de la Plaza Cataluña puso en peligro evidente tanto al Rey como a los asistentes al acto homenaje a las víctimas del 17A, porque impedía el control de varias ventanas con vista directa al lugar donde se celebró el acto. Era lo que se considera "un punto ciego" para la seguridad.
Corresponde al Gobierno, ahora, exigir responsabilidades por este hecho, entre las que se encuentran las del propio Ejecutivo por no dar la orden de retirarla, del ayuntamiento de la podemita Colau por permitir su colocación y a los mocetes de la Escuadra por no impedir su colocación -eran los encargados los de este cuerpo policial catalán de velar por la seguridad en las alturas- y amenazar, por contra, a un empresario que se prestó a retirarla. Aquí no valen paños calientes. El que la hizo que la pague. NO es un hecho baladí.
Por lo demás, el indecente presidente de la Generalidad lo que tenía que hacer era dimitir, para ser congruente con sus siempre escandalosas y gilipollescas declaraciones. ¡No decía el muy imbécil, que no asistiría a ningún acto donde estuviera el Rey! Pues, ya lo ven, Allí se presentó y saludó a Felipe VI. Y allí mismo dio muestras de su mala educación, presentándole a la esposa del impresentable Form como otra "víctima". Por cierto, y como saben, el exconsejero Form está en la cárcel acusado de rebelión. Pero si mala entraña tuvo el nazi xenófobo elQuinito, no menos la tuvo la mujer del reo, que afirmaba que "no soy yo la que tenía que estar aquí". Y no se equivocaba la señora. Estaba allí porque la había colado elQuinito, saltándose a la torera -como siempre- el protocolo y la buena educación. La señor podría haber estado en cualquier lugar, menos allí, porque no le correspondía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar con respeto