La "bestia" Dopazo

Así, así, la “bestia” Dopazo es así. Un empresario, ex guardia civil, ha sido capaz de congregar en Barcelona, a las puertas de la Dia-da, a más de cincuenta mil personas, con banderas de todo, menos de los independentistas. No ha contado con publicidad, ni con el respaldo de partidos políticos, aunque sí asistieron representantes de laPepé, Ciudadanos y VOX, con presencia de su jefe de filas, Abascal. Los chorizos independentistas, defensores de la república, que pese a intentarlo en varias ocasiones fueron incapaces de abortar la manifestación, y llamaban fascistas a los manifestantes.

Joér, narices tiene la cosa. Los amarillistas –por lo de los lazos de la “marrana-da”-, que presumen de demócratas y pacifistas, no soportan que otros expresen democráticamente sus ideas y han amenazado a los manifestantes y proferido toda clase de insultos. ¡Demócratas de mierda y cobardes estos secesionistas! Sólo saben hacer estas cosas en manada, como animales, y por que se sienten protegidos por la policía sumisa al nazi de la Generalidad.

Bien, pues eso. Que el xenófobo elQuinito, obediente a “la voz de su amo”, lanzó a sus perros a ladrar al “bestia Dopazo”, como así lo califica el de la Generalidad. Le tiene miedo a Dopazo. Fíjense en cómo ha sido capaz de convocar este hombre a cincuenta mil personas, con todos los elementos en contra, incluida la podemita alcaldesa del ayuntamiento de Barcelona, la impresentable laColau, que le ha puesto toda clase de impedimentos, de los habidos y por haber. Hasta la guardia municipal –otra vez la guardia municipal barcelonesa- daba una asistencia a la manifestación de mil personas. ¡Jéjé! Está bien jorobada la podemita: al menos cincuenta mil personas; se han lucido los municipales.

¡Jéjé! Los de Dopazo se manifestaron, pese a todo, por la unidad de España, contra las negociaciones de elPedroQué? con los anti constitucionalistas y por el adelanto electoral de las Generales. Si la convocatoria la hicieran de manera formal las asociaciones constitucionalistas, imaginen, se iban a cuaguar los Comités de Defensa de la República. Se superaría, visto lo visto, el millón de personas del año pasado; con creces. Sería la manera de demostrarle de nuevo a los que quieren romper España que las calles no son suyas, y que si quieren separase de España, que se vayan ellos y constituyan nación, si es lo que quieren, en otra parte.

A todo esto, va y sale el ministro “gorrilla” y dice que el que haya políticos presos no ayuda a normalizar la situación”. Este hombre, el ministro de Fomento, Ábalos, no da una al derechas. Tras insultar a los españoles que retiran lazos amarillos, que están en su derecho, lamenta ahora que haya presos golpistas –sean políticos de profesión o no- en la cárcel, al fin y al cabo unos delincuentes. Para Ábalos son “políticos presos”, no delincuentes presos, aunque sean políticos, que siguen estando acusados de rebelión. ¡Casi nada! Ábalos, prácticamente nada.