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domingo, 17 de febrero de 2019

Franco, a la Sagrada Familia

A elPresiSánchez se le pasan rápido las contrariedades, que no quiere decir que se las eche a la espalda y a correr; ni mucho menos: ni perdona ni olvida. Pero se le ha atravesado ahí la mosca "entrepiernera", que ni la puede espantar -porque no se deja- ni para de zumbarle al oído. Tan convencido estaba de que en dos asaltos acababa con Franco, que le declaró la guerra al muerto. Aun después de los muchos años que lleva muerto el Caudillo -como lo llamaban en su tiempo- y en el lógico silencio, el muerto le está haciendo frente a elPedroQué?
Es más que probable que Sánchez no logre exhumarlo antes de la celebración de las Generales, porque el muerto no se mueve. Y va a ser difícil que alguien lo pueda sacar de su tumba de El Valle de los Caídos. A la oposición frontal con la que se ha encontrado Sánchez de la familia, que sólo lo sacará si es para trasladarlo a la catedral de La Almudena se le suma la negativa del prior del Valle, Santiago Cantera, para quien el templo es inviolable. Así de clarito: "No se llevarán a Franco".
No lo dice el pater Cantera porque sí, que para narices más la de este que las del abad de Monserrá. Hasta avanza que es más que posible que el propio Tribunal Supremo se oponga a la exhumación. Está muy asesorado el pater y asegura que "no se puede tocar el cuerpo de un difunto que se encuentra en un templo custodiado por una orden religiosa en su espacio que es inviolable". Pues, a ver cómo lo soluciona eso Sánchez, que no es que se le vayan a enfrentar los curas de allí a puñal y a espada, sino que parece que eso lo tienen bien estudiado y están confiados en los tribunales.
Sánchez, tan ególatra él, no prestó atención a los detalles cuando se entusiasmó con sacar de su sitio al difunto; ni él ni su acólito amigo, el ultraizquierdista podemita elPabloManué. Ya veremos si no le da la campaña electoral, en vez de aprovechar él el "deshaucio" del muerto. En cualquier caso, siempre le queda a la familia de Franco darle sepultura en la Sagrada Familia, en Barcelona, que ya un paisano ha conseguido más de 156.000 firmas para buscarle cobijo a la momia. Esa curiosa iniciativa se le ha ocurrido a alguien que se hace llamar Hannibal Smith. Hannibal aduce que "en agradecimiento a Cataluña, el resto de España cederá el cuerpo de Franco" para que sea enterrado allí.
¡Quién nos lo iba a decir, y a Sánchez también! Que son ciento cincuenta mil firmas, más que manifestantes salieron el sábado por las calles de Barcelona en contra del juicio contra los golpistas catalanes. La Guardia Urbana de Barcelona dio la cifra de doscientas mil personas. Ni la propia Guardia se creía lo que decía, como tampoco se lo creía la delegación del Gobierno en Madrid, cuando la concentración en Colón contra Sánchez.
Sí que se ha buscado un buen calculador -que todavía no relator- elPresiSánchez en la persona de Tezanos, imitado por el delegado madrileño del Gobierno, que daba 45.000 personas. Y nadie lo despidió. Los organizadores, laPepé y los Cíus, a los que sumó Vox, calculaban unas doscientas mil. Hasta los propios organizadores -que siempre tienen que inflar la cifra- se equivocaron, pero por miedosos, por "acomplejaos". Ni le han exigido a Sánchez que muestre las imagines recogidas desde los helicópteros policiales.

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