Arrimadas, prostituta

Vamos, hombre, faltaría más. De desplantes, nada. Le ha quedado bien clarito al nazi xenófobo que por mucho que los golpistas odien al Rey, este se mueve por España con total libertad y por donde le sale de los güitos. El Rey fue a Cataluña, inauguró lo de los teléfonos y visitó los pabellones que le vinieron en gana. Para esa marcha no le hace falta la compañía del cebonico golpista, que no hay mayor desprecio que no hacer aprecio y más vale solo que en malas y perniciosas compañías. El que sí andaba por allí, pero poco dijo, era elPresiSánchez, sin duda avergonzado por la actitud macarra y mal educada de su interlocutor catalán. Con este es con el que dialoga.

Ni chicha ni limoná. El Rey llegó, vio, venció y el zarrapastroso guerracivilista se escondió por los rincones. A todo esto, agua pasada, por cierto, la gente sigue preguntándose por qué rincones se esconden las feminista –u lo que sean-, que todavía no han salido a defender a la catalana Inés Arrimadas. Ya saben que un elemento de esos llamados cómicos –que no hacen reír a nadie, pero que sí saben dónde están los pesebres, como el de TV3-, en concreto Toni Albá, alias elCalvorota, aconsejó a la ciudadana –terror de los golpistas- que cuando fuera Bruselas tuviera cuidado con no pasarse de parada y fuera a terminar en el Barrio Rojo de Ámsterdam, en Holanda

El Barrio Rojo, para el que no lo sepa –el cornúpeta este sí lo debe conocer bien- es el barrio de la prostitución por excelencia, con lo que estaba insinuando que Arrimadas es eso, una prostituta. Y no es la primera vez que se refiere a ella en esos términos insultantes –o algo más grave-, que ya días atrás, la calificó de “mala puta”. ¡Donde están, repito, las feministas, defendiendo y apoyando a Arrimadas, dónde estarán, que como el “probe” Miguel, no salen! Otra cantada de las progres, a las que no respetan ya ni las del Barrio Rojo.

De todas formas, nos estamos habituando y tomando como algo normal, las imbecilidades que nos sueltan, cada día más, esta especie de cómicos, que no son otra cosa que unos sin vergüenzas y mal educados –acaso pequeños rateros, delincuentes-, que, en el fondo, son unos verdaderos gilipollas. Estos son los que están copando el espacio en España, son los que salen cuando ya pensamos que no entra ni uno más. Pues, siempre hay almas caritativas que les hacen un hueco, como en el metro en hora punto, y los dejan entrar.

Ahí tenemos el ejemplo del bordelino de laSexta, Dani Mateo –ni tan siquiera Daniel-, que como tal que es ignora la existencia de los pañuelos y se suena los mocos en la bandera de España, símbolo representativo de todos los españoles. Aunque bordelino, sí que acertó con la bandera a la que quería ofender; pero, eso es libertad de expresión, dictaminó el juez. ¡Pues vaya juez! Opino yo, también con libertad. LaSexta, pese a la huida de anunciantes ha premiado al gilipollas –opino yo- con no despedirlo de la cadena, miserable medio de comunicación, opino,  yo sigo.

Ahora que para gilipollas, la vergüenza de los abulenses, la cómica o lo que quiera que sea –por mí como si termina en el Barrio Rojo- esa muerta de hambre, que no hace gracias ni a los sofás, que se llama Eva Hache –que lo mismo da que lleve o no hache su apellido-. Esta fue la que llamó “mierdas” a las cerca de trescientas mil personas se congregaron en Colón contra elPedroQué? Muy mal tenía que estar esta gilipollas para decir lo que dijo, y le dieron trabajo en laPrimera, la cadena estatal, que pagamos todos. La cadena llena de paniaguados, aunque no todos; la hache, sí.