Violentos hasta en la sopa

La bien cercada, o la que no se gana en una hora, es decir Zamora, sigue dando de qué hablar en esto de la constitución de los ayuntamientos. Si antes fue que el ultraizquierdista o comunista Guarido logra renovar mandato, y en esta ocasión por mayoría absoluta, sin necesidad de laPesoé, también fue un socialista el que rompiendo las consignas del partido ha permitido que un voxero se haga con la alcaldía de un pueblo a tres kilómetros de la capital zamorana. Es la única alcaldía que consigue en esta provincia el partido de Abascal.

Ahora los de laPesoé pretenden que su concejal entregue el acta y se vaya. Lo tienen difícil, porque ni tan siquiera pueden abrirle expediente, porque el concejal díscolo no es militante del partido sino que iba en la lista socialista como independiente. Lo más probable es que el independiente no renuncie a su concejalía  y que no entregue su acta. Así que, el pueblo de Roales del Pan contará con alcalde de Vox, el único de este partido en la provincia, por obra y gracia de laPesoé.

Pero, vamos que cosas de estas suceden a la menor. Ya ven en el pueblo del nazi xenófobo de la Generalidad, en la propia Cataluña, tuvieron que interrumpir el pleno de constitución y remudarlo por la tarde, porque en cuanto los familiares del neandertal se enteraron de que los republicanos y laPesoé podían pactar un alcalde socialista avisaron al loco presidente catalán y este obligó a suspender el pleno para que se llegara a un acuerdo entre los partidos secesionistas que diera como resultado un alcalde independentista.

¡Faltaría más que en el pueblo de nacimiento del guerra civilista saliera un alcalde de laPesoé y no uno de los anti españolistas. Habría tenido su gracia, ya lo creo. Pero que conste que no salió alcalde el de laPesoé por la presión que metió el neardental hasta el punto de que el pleno, ya digo, se tuvo que suspender y reanudar por la tarde, hasta que los partidos independentistas llegaron a un acuerdo para desbancar al de laPesoé.

Y eso que, como comentábamos ayer, el presidente del Gobierno de España, Sánchez, secretario general de los socialistas y los independentistas mantienen un diálogo secreto, que pretenden negar, aduciendo que sí que es cierto que reanudarán ese diálogo -incluso con relator, si hace falta-, en breves. Todo se andará.

Mientras tanto, los indepes continúan haciendo de las suyas, ahondando en su adoctrinamiento de los jóvenes de manera descarada, incluso delictiva. Antes cuando alguien hacía algo que no les gustaba lo señalaban; ahora, no. Ahora los apuntan, es decir toman nota por escrito y remiten su "fechoría" a las instancias independentistas para que quede constancia y se le abra un historial, en el que, supongo, el "infractor" figurará como traidor a la patria o rebelde, como los golpistas acusados en el juicio, pero al revés.

Eso es lo que le ha sucedido a los alumnos catalanes o residentes en esa región, que recientemente se han examinado de la EBAU. Señalados e inscritos han quedado todos aquellos que solicitaron en impreso del examen en castellano. ¡Santiguados, más bien! Los alumnos, y por extensión su familia, así como al estilo comunista, pero estos en la versión independentista. Para que se hagan una idea de cómo actúan esa gentuza, recientemente echaron de un restaurante en Gerona a una familia entera porque uno de sus miembros llevaba un polo en el que se veía una bandera española. Así son los demócratas y pacifistas independentistas. El hecho, para ellos, no es violencia. Pues así todo.